Posibles reformas laborales se rumean a la hora de repensar el trabajo de la pospandemia. En ese marco, el abodado laboralista, Gustavo Ciampa en diálogo con Estado de Alerta dijo: “yo creo que hay que ir a una reducción que no supere las 6 horas diarias o 36 semanales, primero porque hace a la calidad de vida de los trabajadores y las trabajadoras, segundo porque está demostrado en el mundo que la reducción de la jornada incrementa la productividad al contrario de lo que se dice, disminuye el ausentismo, disminuye la siniestralidad, digamos, disminuye la cantidad de accidentes de trabajo, además permite redistribuir el trabajo existente”, apuntó.
“El derecho del trabajo no crea trabajo, pero el derecho del trabajo con la modulación de la jornada permite redistribuir la jornada”, detalló, y refirió un dato que es muy categórico en esto: “estamos hablando de reducción de jornadas sin reducción de salarios, manteniendo los niveles salariales” porque ya los salarios en la Argentina perdieron en el período 2016/2019 según las mediciones INDEC o el INDEC de la Cámara de Diputados entre un 26,4 y un 31,4% del poder adquisitivo”.
En este combo también juega un rol fundamental el teletrabajo. De hecho en plena pandemia se sancionó la ley que regula la modalidad pero es una ley que se estableció que va a empezar a regir una vez que hayan transcurrido 90 días desde la finalización del ASPO, con lo cual es para ser aplicada en la nueva normalidad que no sabemos cómo será y por lo tanto no es aplicable tal como rige hoy.
Pero «esta ley es un buen paso», afirma Ciampa, en tanto dice “mire, quienes trabajan fuera de los establecimientos de las empresas –que generalmente es desde la casa de los propios trabajadores y trabajadoras y tienen los mismos derechos que cualquier trabajador o cualquier trabajadora”, enfatizó el laboralista, quién se preguntó -¿Y entonces para qué una nueva ley?, a lo que el laboralista se respondió: “yo creo que es necesario y va a haber que hacer retoques en esa ley en algún tiempo. Es necesaria una nueva ley porque el hecho del trabajador en la casa genera necesidades nuevas que no están contempladas ni tienen respuesta en la normativa que está vigente. Entonces lo que hay que hacer es ante nuevas necesidades la ley tiene que generar nuevas respuestas”, se contestó.
Respecto a la posible «ola de juicios» de las que se habla por las suspensiones laborales en pandemia, señaló que «hay preocupación en el sector empresario» ante un juicio adverso respecto al acuerdo tripartito rubricado por Gobierno, UIA y sindicatos para que durante el Aislamiento Social Obligatorio, se pagara sólo el 75% de los salarios a aquellos trabajadores que tuvieran que ser suspendidos por cierre de la actividad.
“Están poniendo el grito en el cielo desde algunos medios y algunos empresarios representantes de los sectores más concentrados” afirmó Ciampa, sobre la reacción a la “medida cautelar dictada por una sala de la Cámara Nacional de Apelaciones del Trabajo que dispusieron que no se aplique una reducción salarial a una trabajadora”
Ciampa lo puso en contexto al fallo, señalando que “es un call center multinacional de una empresa del grupo Telefónica de España” es decir, “no es un comercio de barrio”, afirmó remarcando la diferencia, señalando también que “no es una sentencia definitiva, es una medida cautelar”
Si bien el abogado minimizó éste hecho puntual señaló que “igual el empresariado tiene que preocuparse no en virtud de esta sentencia sino en virtud de estos acuerdos porque tienen una fuerte presunción de ilegalidad” y esto se debe a que “el DNU que emitió el Presidente de la Nación junto al Gabinete de Ministros que dispuso el ASPO el día 20 de marzo y que se viene prorrogando sucesivamente, expresa en su artículo 8vo que mientras dure el ASPO todos los trabajadores y trabajadoras del sector privado tienen derecho al goce íntegro de sus ingresos habituales”.
Entonces, “estos acuerdos que después firmó la UIA con cuatro representantes de la CGT y algunos acuerdos se vienen firmando en algunos sindicatos, únicamente podrían alcanzar –pero ojo, bajo esta fuerte presunción de ilegalidad- a quienes no están yendo a trabajar y no están trabajando tampoco desde sus casas, y además no sean mayores de 60 años, no sean mujeres embarazadas y no tengan factores de riesgo en la salud, porque todos esos tienen derecho sin duda al goce íntegro de los salarios” aclaró Ciampa.
Gustavo Ciampa: «los descuentos salariales por suspensiones tienen presunción de ilegalidad»
Audio Completo – Estado de Alerta – AM770