Este martes los gremios docentes nacionales organizados en la Confederación General del Trabajo, Asociación del Magisterio de Enseñanza Técnica (AMET), Confederación de Educadores Argentinos (CEA), Sindicato Argentino de Docentes Particulares (Sadop) y Unión Docentes Argentinos (UDA), anunciaron un paro para el lunes 26 de febrero, fecha en que está previsto el inicio de clases en varios distritos, si el Gobierno nacional sigue sin convocar a una reunión para el debate de las paritarias docentes a nivel nacional, que fijen un nuevo mínimo para el salario docente. En las últimas horas, el oficialismo los convocó para el martes 27, buscando que levanten la medida de fuerza.
La decisión se tomó después de una reunión en la sede de la UDA, dando tiempo al oficialismo hasta el jueves de esta semana para dar una respuesta que evite la medida de fuerza. “Sin paritaria nacional no comenzarán las clases en todo el país”, sostuvieron los gremios. “Vamos a esperar hasta el jueves, pero ya tenemos la decisión tomada de hacer un paro nacional en el inicio de clases, producto del distanciamiento que propone el Gobierno nacional de no hablar con los trabajadores”, enfatizó Sergio Romero, titular de UDA.
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La secretaria General de Sadop Marina Jaureguiberry, por su parte, enfatizó que si el Gobierno de Javier Milei no convoca a una mesa paritaria antes de mañana no deja a los docentes “otra posibilidad” que un paro que permita “visibilizar” la crítica situación salarial del sector, ante un escenario de inflación descontrolada. “Si no hay paritaria no hay salario mínimo garantizado, no hay actualización del Fondo Nacional de Incentivo Docente (Fonid) para el territorio de todo el país, no hay posibilidad de acordar sobre infraestructura, ni material didáctico y un etcétera muy grande”, agregó.
Desde la Confederación de Trabajadores de la Educación de la República Argentina (CTERA) -integrante de la Central de Trabajadores de la Argentina (CTA)- anticiparon que fijarán posición este jueves, en el marco de su Congreso nacional. La semana pasada la Justicia hizo lugar al reclamo del gremio de suspender el artículo 97 del DNU 70/2023 que declaraba a la educación como “servicio esencial”, un recurso que limitaría fuertemente la posibilidad de convocar a medidas de fuerza, que fue considerado “inconstitucional” por la Justicia.
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Tras el anuncio gremial, finalmente el Gobierno convocó a los cinco sindicatos nacionales del sector para discutir la actualización del salario mínimo para el próximo martes 27 de febrero a las 18, lo que sería un día después al supuesto inicio de clases. La convocatoria fue realizada por la Secretaría de Trabajo y ya anticiparon su participación el titular de la cartera laboral Omar Yasin y el secretario de Educación Carlos Torrendell. También fueron invitados los ministros de educación de las provincias y de la Ciudad de Buenos Aires, en tanto integrantes del Consejo Federal de Educación.
A nivel provincia de Buenos Aires también se confirmó que el Frente de Unidad Docente Bonaerense (integrado por AMET, FEB, SADOP, SUTEBA y UDOCBA) aceptó en las últimas horas la propuesta de aumento salarial de la administración de Axel Kicillof, que implica un «aumento promedio del 20% sobre la base de cálculo correspondiente a diciembre de 2023, que entrará en vigencia a partir del 1° de febrero de 2024». Además, «en pos de mantener el poder adquisitivo del salario docente frente a la constante inflación que enfrentamos», se acordó un nuevo encuentro de negociación para el mes de marzo.
