Francia: Tras 45 días de protesta contra la reforma previsional, volvió a funcionar el transporte

Este lunes, y tras 45 días de interrupción debido a las protestas de los sindicatos, el transporte público de Francia funcionó de manera normal. UNSA, el principal gremio de la empresa RATP, que gestiona el servicio, expresó que los conductores de metro, en asambleas generales, habían votado a favor de una «suspensión» de la huelga, con el fin de recuperar fuerzas, sin pedir el fin del movimiento que se opone a la reforma jubilatoria.

De todos modos, desde los colectivos gremiales indicaron que las protestas podrán continuar si Macron no archiva el proyecto que modifica el sistema previsional. Cédric Robert, vocero del sindicato de la CGT-Cheminots, uno de los más férreos opositores a la iniciativa oficial, anticipó que un «retorno significativo de los huelguistas» es posible para el viernes, día en que se presenta el proyecto de ley de pensiones al Consejo de Ministros.

Incluso, desde la intersindical conformada por la CGT, FO, Solidaires, FSU y CFE-CGC, junto con organizaciones juveniles, incentivan a los afiliados a diagramar nuevas protestas para el próximo fin de semana. Cabe recalcar que la reforma que impulsa el gobierno propone diversas modificaciones en cuanto a los distintos regímenes jubilatorios especiales que rigen en Francia, buscando avanzar hacia una llamada “edad de equilibrio” para la jubilación, extendiendo a 64 años el límite para jubilarse.

Francia: Las protestas no cesan y Macron otorga una concesión «provisoria»

Actualmente hay 42 regímenes especiales que permiten una jubilación anticipada y otras ventajas sociales para sectores determinados como los maquinistas o los empleados del subte. La mayoría se establecieron en la postguerra para reconocer las duras condiciones de trabajo.

Sin embargo, varios sindicatos junto con ciudadanos coparon las principales calles de las principales localidades para oponerse al proyecto en los últimos días y Macron tuvo que ceder, estableciendo que retira el artículo que eleva la edad jubilatoria a los 64 años de los 62 actuales de forma «provisoria». Para el primer ministro, Édouard Philippe «las medidas destinadas a restablecer el equilibrio no deben conducir a pensiones más bajas para preservar el poder adquisitivo de los jubilados, ni a costos laborales más altos para garantizar la competitividad de nuestro economía».