Después del mensaje presidencial anunciando una serie de medidas para “aliviar” la crisis económica desatada por la corrida cambiaria post electoral, los mercados financieros, lejos de tranquilizarse, volvieron a impulsar al dólar por encima de los 60 pesos, cerrando casi a 63 en muchos bancos. Y la dinámica alcista podría continuar el resto de la semana. En ese contexto, los precios no tienen ninguna referencia y en las distintas instancias de la producción y el comercio se vienen sucediendo remarcaciones a ciegas, retención de productos y desabastecimiento.
El impacto se percibió el mismo lunes en las góndolas de los supermercados, cuando los supermercadistas comenzaron a remarcar intensamente luego de recibir listados de precios con hasta un 20% de aumento por parte de los productores y distribuidores, aunque se tratara de pedidos realizados con anterioridad.
También se registraron numerosos faltantes en alimentos y productos de limpieza en las góndolas, tanto por la decisión de los vendedores de guardar los productos hasta que se alcance un nuevo precio de equilibrio, como porque muchos consumidores comenzaron a hacer acopio de productos de primera necesidad en previsión de que la crisis no se resuelva inmediatamente.
Muchos molinos harineros dejaron de entregar bolsas de harina a las panaderías a falta de un precio de referencia. Gerardo Di Cosco, presidente de la Asociación Panaderos de Rosario, reconoció: 2Nos han informado que han suspendido la venta de harinas, debido a la inestabilidad que hay en el dólar”. Y añadió: “Llamamos a la reflexión en un momento muy complicado de nuestro país. Les pedimos a estas grandes empresas que pongan un poquito el hombro para ayudar, puesto que estamos en una situación donde la gente está pasando hambre”.
Empresas como Molinos Río de la Plata (dueña de marcas como Luchetti, Matarazzo, Granja del Sol, Gallo, Terrabusi, Don Vicente, Favorita, Canale, Cocinero, Cruz de Malta, Nobleza Gaucha y Blancaflor) ya envió listados con un 10% de aumento y anticipa otro 10% para los próximos días; AGD (aceites Natura y Cada Día) ajustó 25% y Molinos Cañuelas un 20% en aceite, 15% en harinas (luego sumará otro 15%) y 10% en galletas. Se esperan aumentos en esa línea también de empresas como Unilever (Axe, Comfort, Dove, Hellmann´s, Knorr, Lux, Ala, Rexona, Cif, Clear, Sedal, Drive o Impulse, entre otras), Arcor (marcas Arcor, La Campagnola, Criollitas, Salsati, entre otras), Menoyo, Establecimiento Las Marías (Taragüí, Unión, La Merced), Alicorp (marcas Zorro, Suave, Plusbelle), Inalpa (conservas), Dos Hermanos y Bunge, entre otras.
Con este nivel de remarcación, y su impacto en la inflación de agosto y septiembre, los bonos de entre 1000 y 5000 pesos anunciados por el Gobierno nacional esta mañana apenas servirán para cubrir una parte de los aumentos en los productos de la canasta familiar, sin contar las próximas subas en servicios (que cuentan con buena parte de sus componentes dolarizados).
