El Plan Argentina contra el Hambre tiene varias aristas. Así lo requiere la complejidad de la situación en las zonas más vulnerables de la Argentina. Los municipios del conurbano bonaerense en ese sentido también han puesto “manos a la obra” y organizan ferias con precios accesibles y productos elaborados por cooperativas, Pymes y pequeños productores, lo que los Movimientos Sociales instauraron como la Economía Popular.
La idea es sumar alimentos saludables a precios más accesibles, elaborados por cooperativas, pequeñas y medianas empresas y productores de la agricultura familiar para que no sólo “no haya hambre” sino también para terminar con la malnutrición. Leche, yogurt, verduras, frutas, pescado, yerba y arroz se comercializan a precios mucho más bajo que en los mercados.
“Hacía meses que no compraba leche; a mi nena la tenía a té”, contó en el puesto de los lácteos Vanesa Conde. Estaba con Sofía, de cinco años, y con su mamá, Liliana, ya jubilada. Se llevaron además yogurt, en el puesto de las verduras cargaron acelga, lechuga y cebolla y agregaron antes de volver a casa un kilo de merluza. Habitualmente el presupuesto no les da para más que una dieta de fideos y arroz.
De acuerdo a lo consultado la leche por ejemplo está aún más barata que en Precios Cuidados y se la puede encontrar a $35, con lo cual la tarjeta AlimentAR rinde más y cumple su verdadero objetivo, en el que trabaja la Secretaría de Economía Social que conduce Emilio Pérsico, del Movimiento Evita, en el ministerio a cargo de Daniel Arroyo.
Desde el municipio se colabora con el lugar y los gacebos, mientras que luego cada uno aporta a la comercialización sus productos. Las cooperativas suelen tener entre tres y diez personas a cargo y “en la medida en que podamos vender, vamos a generar más puestos de trabajo” afirmaron, cosa que no sucedería si la tarjeta va directo a los grandes supermercados.
Recordemos que es parte del ambicioso plan que tiene Alberto Fernández, generar trabajo y reconvertir los planes sociales en empleo genuino, generando en los próximos cuatro años, unos tres millones de puestos de trabajo.
Según planteó Horacio Ávila, coordinador de Proyecto 7 que está integrada por personas en situación de calle, lo que pretenden es “que haya también ferias en CABA y en el primero y segundo cordón del conurbano”.
