La empresa de Fabricaciones Militares denominada Fanazul, ubicada en la localidad de Azul, provincia de Buenos Aires, que fue cerrada por la gestión anterior en el año 2018, reabre sus puertas, tal como confirmó el Gobierno nacional.
Gustavo Luján, uno de los trabajadores de la empresa que en este tiempo luchó por la reapertura, se esperanza con que rápidamente Fanazul vuelva a emplear a las 220 personas que quedaron en la calle. Pero, advirtió, que tomará tiempo porque Fanazul todavía está improductiva y se requiere un tiempo para que vuelva a fabricar pólvora y explosivos.
«Estamos contentos y esperanzados, pero con los pies sobre la tierra, porque la fábrica aún sigue siendo improductiva», indicó Luján, quien agregó que «la gran mayoría de los más de 200 trabajadores que quedamos afuera no pudo nunca conseguir un empleo formal, en blanco, cerca de un 10 por ciento y el resto vive de changas».
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Por otro lado, señaló que con un grupo de compañeros, y pese al contexto adverso, «decidimos seguir adelante y allá por junio-julio del año pasado reactivamos la esperanza, ya que empezamos a ver que era posible un cambio de gobierno porque si no cambiaba el gobierno -seamos honestos- no estaríamos próximos a la reactivación».
En tanto, el nuevo presidente del directorio de Fabricaciones Militares Sociedad del Estado, Iván Durigon, comentó que actualmente «la fábrica tiene hoy sólo 16 trabajadores que se encargan del agua y la electricidad por el resguardo de la seguridad», y remarcó que los empleados despedidos podrían ser reincorporados: «Nosotros tenemos dos proyectos que evaluamos para volver a poner la planta a producir. En ambos casos la planta se va a abrir y vamos a trabajar para que los despedidos sean reincorporados».