Desde la Asociación del Personal Jerárquico del Gas (APJ GAS), sindicato que representa a los trabajadores/as de GasNea, manifestaron su “preocupación” por el conflicto entre la provincia de Entre Ríos y la empresa Distribuidora de Gas Natural y denunciaron la existencia de “eventos sospechosos”, ante lo que pidieron una audiencia a las autoridades provinciales y establecieron contacto con la empresa y el ENARGAS.
Desde el gremio recordaron que el gobierno de Entre Ríos emitió el 4 de noviembre el Decreto 3912 “que enumera una serie de potenciales incumplimientos por parte de Gas Nea y un posible quebrantamiento de la ecuación económica del contrato que alterarían las condiciones de la prestación”. Allí además se advierte que gran parte de las inversiones realizadas por la provincia estaban destinadas a la incorporación potencial de más de 100.000 nuevos usuarios de distintas localidades. También se registraron controversias respecto de los estados contables de los años 2020 y 2021. Por todo ello, la provincia también envió una petición al ENARGAS para la revocación del contrato de concesión de la Distribuidora, proponiendo a la empresa Compañía Entrerriana de Gas como futura adjudicataria.
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El gremio también aclaró que “no es verdad que la mayoría de los trabajadores/as de GasNea desempeñen tareas en CABA”, explicando que el 75% de la dotación cumple tareas en la IX Región, la mayoría en la provincia de Entre Ríos. “Esa idea de tratar de dividir a los trabajadores/as por su lugar de trabajo es un error. Somos todos trabajadores/as que sostenemos el servicio público de distribución de gas natural”, añadieron.
Luego agregaron: “·En medio de este clima enrarecido, ocurrió un hecho al menos sospechoso y completamente violento en la Planta City Gate de Concordia que creemos que amerita detallar. El viernes 11 de noviembre alrededor de la medianoche se activó el sistema de alarma avisando de muy baja presión en dicha planta reguladora que abastece a la localidad. Acudió inmediatamente personal de Gas Nea encontrándose con signos de intrusión: ventana del bunker rota, reja, marcos de chapa y arrestallama también rotos; se había realizado un hueco grande por donde el o los vándalos ingresaron. Las dos ramas de regulación se encontraban totalmente cerradas. Una planta, que mantiene la presión de salida a 14 kg, tenía solo 3 kilos de presión. Por la rapidez, compromiso y pericia de los trabajadores que asistieron al llamado, rápidamente se pudieron restablecer los parámetros y eso evitó que gran parte de Concordia se quedara sin gas. Dejamos constancia de que, al finalizar el trabajo operativo, se realizó la denuncia policial correspondiente dejando asentados los daños encontrados”.
En ese marco de “incertidumbre generada, eventos sospechosos y necesidad de clarificar las divergencias planteadas”, el gremio insistió en que los trabajadores deben “tener voz en esta situación sorpresiva ya que somos quienes garantizamos cotidianamente un servicio seguro y de calidad”. Y agregaron: “Queremos ser claros: que se mantiene incólume el compromiso de los trabajadores/as con la prestación del servicio y que se tomarán todas las medidas para garantizar los puestos de trabajo desempeñados en la IX Región (Entre Ríos, Corrientes, Misiones, Formosa y Chaco) y en la sede central de la empresa ubicadas en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Que somos un actor importante en este entramado y necesitamos ser escuchados e intentar clarificar las diferentes posiciones y llevar tranquilidad a todos los trabajadores y sus familias”.
