En un contexto difícil se cumplen 12 años de la recuperación de Aerolíneas Argentinas

Pese a las dificultades del sector debido a la pandemia, desde la Asociación Personal Técnico Aeronáutico celebraron un nuevo aniversario  de la recuperación de Aerolíneas Argentinas, luego de una larga lucha gremial para poder volver a contar en el país con una aerolínea de bandera.

Un 3 de septiembre pero del 2008, el Senado de la Nación aprobaba la ley 26.412 de rescate de Aerolíneas Argentinas. Pero no había sido un camino fácil y la pelea que hubo que dar contra los responsables de este flagelo “el gobierno argentino y el gobierno español” había sido larga y cruel.

«Los trabajadores se habían manifestado en las pistas de despegue y peleaban por los 1347 puestos de trabajo». Así en el 2001 APTA, ya bajo el liderazgo de Ricardo Cirielli, ante el intento de liquidación, «hicimos una campaña bajo la consigna TODOS SOMOS AEROLINEAS», recordó el dirigente sindical.

Como broche de oro de esa campaña “organizamos un recital en el Luna PARK en el que participaron los más importantes artistas argentinos”, destacó Cirielli, quien ya conducía los destinos del gremio. Fue un festival que duró más de 5 horas y con la presencia de más de 12.000 espectadores en su mayoría trabajadoras y trabajadores de Aerolíneas Argentina y Austral LÍNEAS aéreas, con el que se logró generar un gran impacto y finalmente se pudo cumplir el objetivo de salvar a nuestra «aerolínea de bandera».

Aerolíneas Argentinas (AA) fue fundada en 1950 por un decreto del Presidente Juan Domingo Perón. En 1990 el consorcio español Iberia se hizo cargo de la empresa, que cambió su razón social a Aerolíneas Argentinas S.A. En 2001, la nueva gestión incrementó la participación de funcionarios españoles, lo que terminó con el traspaso de la aerolínea al Grupo Marsans.

Finalmente, en 2008, luego de una desinversión histórica durante la década de los ’90 y de una administración fraudulenta, la aerolínea fue nacionalizada y regresó a manos del Estado argentino, convirtiéndola en una de las principales compañías de América del Sur.

Fue mediante un acuerdo firmado en Madrid con los accionistas mayoritarios de Aerolíneas Argentinas S.A., que el Estado recuperó el poder de veto y la posibilidad de tener un miembro titular y uno suplente en la comisión fiscalizadora. Ese hecho constituyó el primer paso hacia la re-estatización definitiva de la aerolínea.