En plena discusión de precios y salarios la deuda declarada como «insostenible” da algo de aire al Gobierno

El Gobierno logró que el FMI declare insostenible la deuda y apoye una importante quita a acreedores privados, lo que se vivió como un triunfo en la noche del miércoles en la Casa Rosada.

Esta declaración se consideraba clave en la pulseada con los bonistas y fue un respaldo hacia la gestión de Fernández y se consiguió luego de la visita que realizó la misión del Fondo Monetario quien declaró “insostenible la deuda argentina”  y pidió que “los bonistas acepten una quita apreciable en sus títulos”.

Eso era exactamente lo que necesitaba el ministro de Economía, Martín Guzmán, para dar credibilidad a sus previsiones de que si el 31 de marzo no se alcanza un acuerdo, el país se encaminará a un default .

En ese marco, este mismo jueves, junto al presidente del Banco Central, Miguel Pesce, Guzmán partirá a Arabia Saudita, donde se reunirá con la titular del organismo, Kristalina Georgieva, para discutir la propuesta oficial de postergar tres años el repago del crédito Stand By contraído en la gestión Macri.

Además el apoyo político del FMI, una de las espadas que tenía en manga Alberto Fernández, fue claro al finalizar el informe. La número dos del organismo para la región, Julie Kozack, y el encargado del caso argentino, Luis Cubeddu, emitieron una declaración de respaldo a los «planes y políticas macroeconómicas» del Gobierno. Esto incluyó un apoyo al sendero hacia el equilibrio fiscal en 2022/2023 planteado por Guzmán la semana pasada en el Congreso, consistente con un escenario de reestructuración más dura de lo previsto con un importante recorte en los cupones de intereses y el capital.

Luego de la intervención del Papa Francisco, la relación es aceitada con los representantes del organismo internacional , quien dictaminó que “es necesaria una quita a los bonistas”, lo que le permite avanzar al ministro de Economía en su necesidad de avanzar ya hacia el tercer mes de gestión con un plan de incentivos para alentar el consumo, incentivar inversiones y definir una estrategia de precios y salarios que posibilite ir bajando la inflación, que si bien tuvo una reducción importante en el mes de enero, -alcanzó 2,3%- sigue siendo muy alta, particularmente en los artículos de la canasta básica alimentaria, los que más consumen las grupos más vulnerables que asciende todavía a -3,6%-.