Marzo: mes clave para saber si habrá o no «recomposición» de jubilaciones con la nueva fórmula de movilidad

El próximo mes será el turno de comprobar que tan buena o mala sea la nueva fórmula de movilidad jubilatoria que se aprobó en el Congreso Nacional antes de terminar el 2020. Ahora se pondrá blanco sobre negro en un contexto donde desacelerar el impulso inflacionario de los últimos meses parece clave para dar alguna certidumbre a la golpeada economía.

De ahí la honda preocupación del Gobierno y su obstinación en sellar un acuerdo político entre los distintos actores de la economía respecto a precios y salarios, lo que permitiría sostener en «la economía doméstica» el mismo porcentaje de inflación estipulado en el Presupuesto anual 2021.

El primer aumento del año para los jubilados rondaría entre un 8 y un 10% en el mes de marzo, señalan las estimaciones privadas, pero por el momento habrá que esperar. Allí se verá concretamente si existe o no la recomposición de las jubilaciones y pensiones que están a cargo de la Anses y que garantizó el oficialismo, impulsor de la fórmula que rechazó la oposición, o sí, por el contrario, la fórmula no favorece a los trabajadores pasivos.

De ser realmente así podría ubicarse por debajo de la inflación del último trimestre de 2020, que es el tomado como referencia por la fórmula, que fue de 11,4%., cuestión que se intenta revertir pues dentro de las políticas macroeconómicas el fortalecimiento del consumo interno es una de las principales y no ocurrirá de no recomponerse los salarios y las jubilaciones.

Si bien la noticia de un proyecto oficial que plantea subir el piso del pago de Ganancias a jubilados que ganen más de ocho jubilaciones mínimas es una buena noticia que acompaña a los mayores, la buena noticia se reduce a un universo muy pequeño, con lo cual la expectativa está puesta en la aplicación de la fórmula que contempla, por un lado, el 50% de la variación trimestral de los salarios, según uno de dos índices (el que haya tenido mejor evolución): la Remuneración Imponible Promedio de los Trabajadores Estables (Ripte) o el índice salarial del INDEC.

El dato de diciembre en el INDEC señala que avanzó 9,4% y es, entonces, la que se considera para hacer el cálculo en este período, porque el Ripte tuvo un incremento inferior de un 8%.

Por la parte de la fórmula referida a salarios, entonces, sería un 4,7%. Y a eso se le suma la mitad de la variación interanual de la recaudación de recursos tributarios de la Anses por beneficio, según el dato referido al último trimestre del año pasado, dato que falta conocer.