El empresariado nacional viene siguiendo con atención el escándalo del Vacunatorio VIP que le costara el puesto al ex ministro de Salud Ginés González García, aunque por el momento no se han detectado nombres relevantes del sector en las listas de vacunación de privilegio. La preocupación del sector empresarial pasa por la exigencia de avance de la campaña de inmunización para que los trabajadores mayores de 60 años puedan volver a cumplir con sus obligaciones laborales en el marco de la epidemia de coronavirus.
En la lista de 70 personas que difundió el Ministerio de Salud como vacunados especiales sin turno no figuran empresarios en actividad, más allá del español Florencio Aldrey Iglesias, dueño hoteles y medios de comunicación en la ciudad de Mar del Plata (junto con tres familiares) y de los empresarios jubilados Seza Manukian y Félix Guille. Desde la Unión Industrial Argentina (UIA) festejan que no hayan aparecido hombres de negocios del sector fabril.
La organización industrialista le pedirá a la flamante titular de la cartera sanitaria Carla Vizzotti una reunión urgente para pedirle autorización para que las empresas puedan vacunar por sí mismas a los empleados mayores de 60 años. Según calculan desde las empresas, hasta el 10% de las plantillas laborales podría estar en este momento con licencia laboral hace un año en el contexto de la epidemia de coronavirus por pertenecer a grupos de riesgo. Desde el sector empresario plantean la necesidad de avanzar con una resolución del tema, incluso abriendo la posibilidad de discutir un posible despido, más allá de que por el momento siguen prohibidas las desvinculaciones sin causa por parte del Gobierno nacional.
Este acuerdo parece muy difícil de lograr con el oficialismo, pero es posible que se pueda avanzar en la reclamada campaña de inmunización para los trabajadores licenciados que hoy generan fuertes sobrecostos empresariales, ya que en para los próximos meses se prevé el arribo de cerca de 11 millones de dosis.
