El Gobierno nacional de Javier Milei confirmó este martes el fin del programa Procrear “tal como lo conocemos”, una iniciativa creada en 2012 para facilitar el acceso a la vivienda de sectores populares por medio de créditos estatales. El procrear hoy tiene más de 17 mil obras en curso, cuyo destino es incierto. Un nuevo golpe sobre la construcción, ya duramente impactada por el fin de la obra pública.
El vocero presidencial Manuel Adorni informó desde sus redes sociales: “Dos novedades económicas: a partir de mañana el plan Procrear tal y como lo conocemos dejará de existir. Además de esto, se comenzarán a permitir las ‘hipotecas divisibles’ para proyectos inmobiliarios en desarrollo. Gran gestión de Luis Caputo. Fin”.
El Programa de Crédito Argentino del Bicentenario para la Vivienda Única Familiar, conocido como Procrear, se basaba en un fondo fiduciario gestionado la Secretaría de Desarrollo Territorial, Hábitat y Vivienda, dependiente del Ministerio de Economía que encabeza Luis Caputo. El Gobierno ya cerró fondos de este tipo vinculados a educación, salud, actividad agropecuaria, protección de bosques y urbanización de barrios, entre varios otros.
La iniciativa no sólo se enmarca en un escenario de crecientes dificultades para el acceso a la vivienda por el desplome del poder adquisitivo de los salarios, sino que además se ubica en un contexto de paralización de la obra pública (decidida a inicios de la gestión de La Libertad Avanza), que ya repercutió en el sector con la pérdida de más de 150 mil puestos de trabajo, según denunció la Unión Obrera de la Construcción (Uocra).
Con Milei se perdieron casi 200 mil empleos registrados, más de la mitad en la construcción
Con diversos cambios a lo largo del tiempo, el Procrear ofrecía programas para desarrollo urbanístico (créditos para la compra de viviendas construidas en predios urbanísticos de todo el país), acceso a lotes para la construcción (financiación para la compra de un lote y crédito complementario para construir) y mejoramiento de gas (créditos para instalar una red de gas de hasta tres bocas). En los dos primeros casos se trataba de créditos a tasa cero y con devolución en hasta 30 años. También había líneas para construcción y refacción, para compra de materiales y contratación de mano de obra.
De acuerdo con datos oficiales, se construyeron más de 4 millones de metros cuadrados de vivienda entre 2021 y 2023, con el 83% de las viviendas terminadas en el marco de los créditos para la construcción. El ex ministro de Desarrollo Territorial y Hábitat Santiago Magiotti remarcó que durante su gestión (2019-2023) se entregaron 141.612 viviendas en todo el país, con “una cobrabilidad de casi el 99%”.
La nueva medida oficial para reducir el déficit fiscal impactará no sólo en las posibilidades de acceso a una vivienda digna de los sectores populares sino que también implicará la paralización y el no inicio de miles de obras, generando un nuevo impacto en el empleo de un sector como el de la construcción, un histórico motor de la economía nacional.