Durante este semana convulsionada en el ámbito económico y con alarmas varias encendidas en la zona del AMBA y el interior del país sobre el agotamiento de los médicos intensivistas a los que la pandemia no les da tregua, desde la Asociación Médica de la República Argentina, AMRA se realizó un pedido salarial de magnitud que implica llevar a 100 mil pesos el salario de un médico ingresante.
Al respecto, el secretario general de la entidad, afirmó que están “exigiendo en todos los sectores un ingreso horizontal arriba de los $100.000 para médicos ingresantes”, además de “que se cumpla el valor mínimo ético para guardias ($30.600) y para profesionales de Terapia Intensiva ($37.620)”.
Además, el reclamo incluye “el reconocimiento a los profesionales jubilados pasando las bonificaciones no remunerativas a REMUNERATIVAS”, y también el “pase a planta permanente de los profesionales con contratos temporarios y reapertura de paritarias URGENTE”.
Así, en pleno pico de la pandemia, desde AMRA volvieron a realizar reclamos ante el Ministerio de Salud de la Nación, el Ministerio de Trabajo de la Provincia de Buenos Aires y las clínicas y sanatorios donde exigieron el cumplimiento de los Convenios Colectivos de Trabajo.
Luego de los difíciles días que se suscitaron la semana anterior, provocados por la protesta policial y su repudiable forma, “nuestra organización gremial ha considerado volver a sobre el reclamo salarial y por la apertura de la negociación paritaria pendiente y que fue acordada para el mes de julio de 2020”, disparó su secretario general, Erick Mendoza Díaz.
Ya habían solicitado durante los meses de julio y agosto del corriente año la reapertura de manera formal mediante las notas correspondientes. En este sentido, “reclamar salarios y condiciones de trabajo no es una simple confrontación” y en esta oportunidad la presentación en tiempos de pandemia apunta a solicitar “valores acordes a la dignidad laboral que nos corresponde y consideramos justa”, finalizaron.
