El pago de un subsidio a empresas autogestionadas alienta expectativas sobre la vuelta del IFE y el ATP

Mientras el plan original de vacunación se encuentra con demoras por los retrasos de producción de la vacuna rusa Sputnik V y el impacto de la segunda ola de la epidemia de coronavirus se hace sentir con fuerza en nuestro país y en el mundo, crecen las especulaciones respecto del posible retorno de planes de asistencia estatales como el Ingreso Familiar de Emergencia (IFE) o el Programa de Asistencia al Trabajo y la Producción (ATP).

Además de las afirmaciones del ministro de Desarrollo Social Daniel Arroyo, quien en los últimos tiempos viene asegurando que ante una complicación de la situación económica y social por la epidemia el Gobierno no dudaría en recurrir a estas herramientas, aún cuando no estén contempladas en el Presupuesto 2021, otro elemento que da pie a las especulaciones es la reciente confirmación de un nuevo pago de 9 mil pesos por única vez para 35.000 trabajadores de cooperativas afectadas por la caída de la actividad.

¿Vuelven IFE y ATP? Anticipan que si hay rebrote se tomarán “las medidas sociales excepcionales que haya que tomar”

El monto pagado este martes constituye un aporte no remunerativo destinado a cerca de 300 empresas inscriptas en el Programa de Trabajo Autogestionado (PTA) que previamente habían solicitado apoyo económico estatal. Este subsidio extraordinario se autorizó por la resolución 127/2021 publicada este martes por el Ministerio de Trabajo.

El apoyo extraordinario a las empresas autogestionadas en el marco de la epidemia comenzó en abril de 2020 como asistencia individual a los trabajadores de aquellas que hubieran reducido su producción, para ayudar a completar los salarios de los integrantes que no llegaran al salario mínimo. Así se pagaron 6 mil pesos en abril y mayo, monto que pasó a 16,5 mil en junio y julio, para bajar a 9 mil en los meses siguientes. La nueva resolución de la cartera laboral extendió el beneficio un mes más, accediendo al pedido de las cooperativas y reconociendo “la prolongación de los efectos de la pandemia en el nivel de actividad económica y en el nivel de ingresos de las unidades productivas autogestionadas”.