Marcelo Urban, interventor del Sindicato Unidos Portuarios Argentinos (SUPA) de Puerto General San Martín, Bella Vista, Timbúes y Puerto Gaboto, consideró que “la realidad de la organización es compleja y representa todo un desafío” y reconoció que halló “buena recepción del personal”.
“Más allá de la compleja situación por la que atraviesa la organización y el desafío que la tarea implica en un gremio con historia e importancia regional, obtuve una buena recepción de parte de los trabajadores portuarios”, puntualizó el interventor quen asumió el cargo por disposición judicial.
Urban, puesto en funciones hace dos días por funcionarios del Ministerio de Producción y Trabajo, aseguró que los trabajadores deliberaron en asamblea y dieron el “visto bueno” a la decisión judicial de intervenir el SUPA, gremio previamente conducido por Herme Juárez, actualmente detenido en el marco de una causa que lo investiga por los posibles delitos de asociación ilícita, coacción agravada, administración fraudulenta y lavado de activos de origen ilegal.
Procesaron con prisión preventiva a Herme Juárez, titular del SUPA
“El SUPA de la región tiene varios problemas y carece de bienes a su nombre. La intervención ya requirió documentación formal para producir el primer informe, que será elevado a la autoridad de aplicación. Los trabajadores están colaborando, al igual que los suspendidos ex integrantes de conducción”, apuntó Urban.
La intervención oficial del gremio respondió a una decisión de la Justicia laboral, por la que los jueces Héctor Guisado y Manuel Diez ordenaron la medida al Ministerio de Producción y Trabajo con el objetivo de avanzar en los 180 días de su vigencia en “los actos conservatorios y de administración para subsanar las irregularidades” derivadas de la gestión de Juárez.
