A diez días de haber asumido la gestión, el Gobierno de Alberto Fernández, en el primer encuentro formal con los sindicatos-, acordó disponer de un aumento generalizado -por decreto- para los trabajadores privados y estatales antes de fin de año, a cuenta de la paritaria de 2020.
Al terminar el encuentro, del que no se habían dado detalles, se supo que no se llegó a oficializar en la reunión la cifra del incremento que se anunciará la semana que viene y que se pondría en marcha con el salario de enero.
En principio sería un pago con sumas fijas de carácter no remunerativa y el monto del que se viene hablando en otras reuniones sectoriales ronda entre los 6.000 y los 8.000 pesos. Algunos aseguran que podría llegar a $10.000.
En medio de la crisis y la caída del consumo, el objetivo central de la medida es apuntalar las escalas salariales más bajas, cuestiones en las que la CGT y la CTA estuvieron de acuerdo y se comprometieron a acompañar al Gobierno.
Fueron varias horas de repaso de los principales temas que tienen que ver con atacar el la “delicada situación social” que atraviesa el país, en la cual coincidieron es fundamental reactivar el consumo interno e incrementar la producción.
Lo que sí fue claro es que el incremento será a cuenta de las próximas paritarias, es decir que los acuerdos vigentes o cláusulas gatillo que se deben discutir en las próximas semanas se mantienen sin cambios, según explicaron los representantes de los trabajadores. Todo esto con la condición necesaria de que sea aprobado el megaproyecto de “Emergencia Económica” que se trata en el Congreso”.
Encabezado por Santiago Cafiero, el jefe de Gabinete, estuvieron presentes los ministros Claudio Moroni (Trabajo), Matías Kulfas (Desarrollo Productivo), y el secretario de Asuntos Estratégicos, Gustavo Beliz, quienes recibieron en la Casa Rosada a los sindicalistas, Hugo Moyano, de Camioneros y a los secretarios generales de la CGT: Héctor Daer y Carlos Acuña y de la CTA, Hugo Yasky.
Estuvieron también, Antonio Caló (Metalúrgicos), Omar Viviani (Taxistas), Sergio Palazzo (La Bancaria), Omar Maturano (La Fraternidad), Hugo «Cachorro» Godoy (ATE), Ricardo Peidro (CTA Autónoma), Roberto Baradel (Trabajadores de la Educación), Dante Catalán (Sindicato de Obreros Unidos Marítimos), Armando Cavalieri (Comercio), Luis Lingieri (Obras Sanitarias), Gerardo Martínez (Uocra), Jorge Sola (Seguros), Eduardo Llanos (Aeronáuticos) y Claudia Baigorria (CTA Autónomos).
Al igual que el aumento de jubilaciones por decreto, la medida genera algún resquemor en el sector empesario, particularmente en las PyMes donde han señalado que «no se puede imponer un aumento generalizado cuando quizás muchos no lo puedan afrontar», por lo que abogados laboralistas insistieron en que la contracara de ésta medida puede ser un aluvión de juicios al Estado.