Este viernes se reunirán representantes del gobierno con dirigentes del sindicato petrolero, quienes denuncian que casi 2 mil trajadores fueron despedidos desde el congelamiento de combustibles decidido por Mauricio Macri después de la debacle electoral de las PASO de agosto de año pasado.
Según denuncian desde el sindicato de Petroleros Privados de Río Negro, Neuquén y La Pampa, conducido por el histórico Guillermo Pereyra, las inversiones en la industria petrolera se frenaron después del congelamiento, traduciéndose esto en 1900 despidos de trabajadores del sector, especialmente en el polo hidrocarburífero de Vaca Muerta.
Petroleros en alerta por suspensiones y congelamiento de salarios
La reunión se realizara este viernes 17, unos días antes de que se concrete el llamado a movilización definido por el gremio para el 23 del mes en curso, en el centro de la capital neuquina. El 28 de enero, además, vence la conciliación obligatoria definida por el Ministerio de Trabajo a fines de diciembre.
Según Pereyra: “Esperamos hasta el viernes porque nos dijeron que nos iban a llamar, pero no pasó nada. Si el 28 no llegamos con un acuerdo se activan todos los despidos. Esta situación es gravísima”. El dirigente luego aclaró: “La movilización no es contra el Gobierno sino para que las empresas tomen conciencia y reaccionen. Queremos hablar sobre los despidos y suspensiones de los trabajadores. Y las empresas no dialogan desde el 27 de diciembre”.
Y concluyó: “Somos coherentes, siempre acatamos las conciliaciones obligatorias, no cortamos rutas, reclamamos lo que es justo. No hay porque molestar al resto de la gente. Los petroleros nos quieren tomar de rehenes, quieren usar a los trabajadores como su prenda de negociación con el Gobierno. Esto es inaceptable, con los trabajadores no se juega”.
