En plena campaña electoral y ante el reclamo de jubilados y de amas de casa, el Gobierno –por el contrario de lo que había anunciado – analiza prorrogar el plazo para acogerse a la moratoria para las mujeres de entre 60 y 65 años
Dicha moratoria vence el próximo 23 de julio, pero la ley 27.260, en el artículo 22, contempla la posibilidad de que pueda ser prorrogada otros 3 años más, medida que el Gobierno ya analiza con mayor benevolencia, teniendo en cuenta su performance negativa en las últimas encuestas.
De no prorrogarse la medida, las mujeres entre esas edades, que tengan menos de 30 años de aportes, no podrán jubilarse. Y deberán esperar hasta tener los 65 años para acceder a la PUAM (Pensión Universal para el Adulto Mayor). Y en ese caso cobrarán un haber equivalente al 80% del haber mínimo (hoy $8.328), al margen de la cantidad de años aportados al sistema.
De todos modos enciende alarmas que un plan de similares características para hombres, establecido en el decreto que reglamentó la Reparación Histórica en 2016, ya venció.
Acceder a la jubilación para las mujeres significa contar con 60 años de edad y 30 de servicios con aportes. Sin embargo, por la alta informalidad en especial entre las mujeres (caso Personal Doméstico, con 70% de empleo «en negro») la moratoria -ley 26.970- permite regularizar la falta de aportes desde los 18 años (cumplidos en 1977) hasta la fecha límite de regularización –31 de diciembre de 2003–.
Así es que para acceder a este régimen, las mujeres podrán regularizar hasta 26 o 27 años faltantes y contar al menos con 3 o 4 años de aportes posteriores a 2003, completando los 30 años requeridos. Cuanta mayor cantidad de meses de aportes anteriores y posteriores a 2003 hayan realizado, menores serán los años que necesitará justificar por medio de la moratoria.
Son requisitos para adherir a esta moratoria que la mujer haya cumplido 60 años antes del 23 de julio. No es posible regularizar aportes antes del 23 de julio para jubilarse después de esa fecha por no tener la edad o años de aportes después de 2003.
Una vez iniciado el trámite, ANSES calcula la deuda por los meses y años de aportes que se regularizarán a través de la moratoria y la descontará del haber jubilatorio que cobrará la mujer ya jubilada –el mínimo hoy es de $10.410–. Por ejemplo, con 60 años y con 3 años de aportes posteriores a 2003 (27 años de regularización) le descontarán a valores de hoy $470 por mes, ajustables por movilidad, durante 60 meses.
Así, entonces esta medida que pensaba aplicar el Gobierno en concordancia con el pedido del Fondo Monetario Internacional que insiste en el achicamiento de los gastos previsionales para lograr las metas de déficit cero a las que se comprometió Macri al firmar el acuerdo del préstamo Stand By, podría ser revisada, en beneficio de cientos de argentinos que han sufrido las consecuencias de la informalidad laboral.
