Después de lanzar más señales al mercado financiero en relación con la intención oficial de manejar el déficit y reducir la emisión monetaria, este lunes el ministro de Economía Martín Guzmán sostuvo que “el sistema financiero está bien, está robusto” y planteó la necesidad de “poner las cuentas en orden a una velocidad que nos permita crecer”.
El titular de Economía explicó que la robustez del sistema financiero nacional se explica porque “los dólares están en los encajes en el BCRA y en los bancos, de manera que no hay que tener ningún temor”. Y agregó: “Si hay una gran lección que aprendimos los argentinos es cuidar los depósitos de la gente y no prestar dólares a quien no produce dólares”.
En cuanto a la crítica situación del mercado cambiario reconoció que la brecha entre la cotización oficial del dólar y su precio blue “es un tema que nos ocupa porque los mercados paralelos generan expectativas y el contado con liquidación es también un mercado, existe, no lo podemos negar, pero debemos hacer que no sea tan volátil”.
Guzmán aceptó que “cuando hay controles de capitales como ahora, hay brecha, pero lo importante es que eso no se traslada a los precios”. Luego sostuvo que las tensiones cambiarias eran preexistentes y detalló: “Estamos buscando que la brecha vaya a 0, ahora está en el 90% y creemos que si baja a niveles del 50/60% sería más adecuado”.
El Gobierno extendió hasta fin de enero la vigencia del programa Precios Máximos
En cuanto a las posibles tensiones con otros funcionarios del Gobierno (mucho se ha comentado sobre la diferencia de criterios con el titular del Banco Central Miguel Pesce), el ministro consideró: “Todas las medidas son consensuadas pero el Presidente me dio la palabra final y eso es lo que está sucediendo”.
En cuanto a la renegociación de la deuda externa argentina afirmó que fue “necesaria pero no suficiente” y anticipó que ahora hace falta que la economía “se recupere transitando un sendero de estabilidad y para lograr eso, es necesario poner las cuentas en orden a una velocidad que nos permita crecer y usar la política pública para alentar la generación de trabajo y las exportaciones para tener las divisas que necesitamos”. Y añadió: “No se puede vivir del financiamiento monetario, el presupuesto 2021 da un marco de certidumbre porque se redefinen prioridades. Se gasta más en salud pública, educación, investigación y desarrollo y se gasta menos en el pago de la deuda y avanzamos en un programa plurianual”.
Luego pronosticó: “El déficit primario será de 7,2% y el financiero estará en 9%”. Y aclaró: “Nosotros no hablamos de recorte de gastos, hablamos de un equilibrio fiscal de poner las cuentas en orden, mediante la recuperación económica”. En ese sentido, anticipó un crecimiento del PBI de 5,5% para 2021.
Finalmente, sobre los salarios aseguró que “se ha logrado proteger el poder adquisitivo del salario porque se tuvo que proteger el trabajo en un contexto sin precedentes como es el de la pandemia, donde, a través de los programas de ayuda a las empresas, se buscó proteger el trabajo”. Y concluyó: “Los subsidios permanecerán constantes en términos de producto», y anticipó que se está definiendo un nuevo cuadro tarifario a partir de enero”.
