De acuerdo con el último reporte de la Fundación Observatorio Pyme, durante el segundo trimestre del año el 33% de las pequeñas y medianas empresas industriales perdió mercado local gracias a la apertura indiscriminada de las importaciones decidida por el Gobierno nacional de Javier Milei. Esto se tradujo en una reducción de casi 5% en el empleo en el sector Pyme. Un área particularmente golpeada es la del juguete, un dato relevante a menos de una semana de un Día del Niño que se anticipa como dramático para la industria local.
El estudio se realizó sobre 407 empresas representativas del complejo industrial Pyme, destacando que la cantidad de empresas que perciben una amenaza por la apertura de importaciones subió al 45%, la cifra más alta en casi 15 años, mientras que el 33% reconoció haber perdido mercado por el fenómeno. En un análisis sectorial, este retroceso en el mercado local se muestra con mayor impacto en el área textil (con el 51% de las empresas reconociendo la caída), en el de metalmecánica (42%), el de caucho y químicos (37%), el de muebles y madera (31%) y el de alimentos y bebidas (10%).
Para la mayoría de las empresas consultadas (73%), la principal amenaza proviene de China, seguida de lejos por Brasil (16,6%). El 45% considera que estas importaciones implican una competencia desleal, el 35% advierte sobre el riesgo de que los productos importados no cumplan con las normas locales y el 17% directamente denuncia contrabando. Este proceso implicó la pérdida de un 4,7% en el empleo en las pymes industriales durante el segundo trimestre del año, acumulando ya 9 trimestres consecutivos de retroceso (la totalidad del mandato de Milei). Un cuarto de las empresas consultadas reconoció reducción de personal.
El propio Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec) reconoce el impacto importador, ya que durante junio las importaciones alcanzaron “un total de u$s6.370 millones, lo que representó un incremento interanual de 35,9%”, un incremento de 53,2% en cuanto a cantidades. Los rubros con mayor volumen fueron bienes intermedios (33%), piezas y accesorios (19%), bienes de capital (19%), bienes de consumo (14%, el rubro con mayor aumento, que casi duplicó al año previo) y combustibles y lubricantes (5,1%).
Después de abrir las importaciones, el Gobierno ‘ningunea’ a la UIA y castiga a las PyMes
Para el sector juguetero, la apertura indiscriminada y las facilidades para el courier puerta a puerta constituyen un golpe contundente, ya que en el último semestre el ingreso de juguetes creció casi en un 80% en monto (59 millones de dólares) y un 110% en volúmen (alcanzando las 11 mil toneladas). De acuerdo con la Cámara Argentina de la Industria del Juguete (CAIj) esto hizo que aumentara de 265 a 501 la cantidad de empresas que se reconvirtieron apostando a la venta de juguetes importados. Un documento de la organización detalla que el 43% proviene de China e ingresa a valores menores a los tres dólares por kilo. El sector local fabricante de juguetes está constituido por 180 empresas pyme, que generan cerca de 8 mil empleos directos, pero que acumulan ya dos años consecutivos de caídas en las ventas y que para el inminente Día del Niño (17 de agosto) ven sus expectativas frustradas por las políticas nacionales.
Desde la misma Unión Industrial Argentina (UIA) reconocieron en los últimos días que “la industria enfrenta una suba en los costos internos que tiene un impacto negativo en la competitividad de la producción nacional, junto con un menor nivel demanda interna principalmente por una mayor competencia frente a la importación de bienes terminados”. Y detallaron: “Durante el primer semestre del año, las importaciones de bienes de consumo alcanzaron los u$s5.268 millones de dólares. Esto marca una suba del 32% contra 2023, cuando la producción industrial registró una caída de 10% en el mismo período”.