A pesar de que el mercado inmobiliario contó con menores restricciones en el mes de junio gracias a la flexibilización de ciertas actividades en el marco de la cuarentena por la epidemia de coronavirus, apenas se firmaron 1405 escrituras de compraventa, según informó el Colegio de Escribanos de la Ciudad de Buenos Aires, lo que implica una caída interanual del 48% en lo que se confirmó como el peor junio de la década.
“Cerramos un semestre de poco más de 6.000 escrituras. Significa que un escribano realizó menos de media escritura por mes aproximadamente. Hay que considerar que junio fue un mes un poco más abierto, pero si nos anticipamos a julio tendremos ya tres semanas de mayores restricciones”, detalló Carlos Allende, titular de la entidad que agrupa a los escribanos porteños. “Estamos convencidos que activando una Mesa de Diálogo Inmobiliaria, que ponga en foco la necesidad de la vivienda, podremos ir aportando soluciones», añadió el directivo.
Coronavirus: La crisis impacta con fuerza en las inmobiliarias y en los inquilinos
La actividad del sector que acumula 25 meses consecutivos de caída en su actividad, sumando el impacto de la epidemia al gravísimo escenario dejado por el gobierno de Cambiemos. En relación con mayo, la actividad subió un 106,3% gracias al levantamiento de las restricciones a la circulación ciudadana, marcando una recuperación desde el piso de abril que había sido de apenas siete escrituras realizadas.
Según el Colegio de Escribanos, el monto promedio en pesos involucrado en las transacciones de junio avanzó 40% en la comparación interanual, ubicándose en $7.268.750, aunque en moneda dura esto implicó una baja de 13,1%, situándose en los 100.341 dólares por operación (lo que confirma un abaratamiento de los precios de los inmuebles en dólares).
También el crédito bancario anotó un retroceso del 43,2% interanual, ya que sólo se realizaron 126 escrituras a través de hipotecas. Esta modalidad acumula una baja del 58% en los primeros seis meses del año.
