Los docentes porteños nucleados en UTE-CTERA profundizan su plan de lucha contra el GCBA, al que acusan de «negacionismo sanitario» en un contexto marcado por la pandemia del Coronavirus.
Los maestros hacen foco en «las pésimas condiciones» en las que están dando clases, con bajas temperaturas y escasas posibilidades para cumplir el protocolo sanitario vigente. Por eso, realizaron un «frazadazo», con el apoyo de la Multisectorial por la escuela pública en las puerta del Ministerio de Educación porteño, ubicado en la Calle Perette y Calle 10 Barrio 31.
«Con estas bajas temperaturas, las tasas de incidencia muy por encima de los límites marcados por el Consejo Federal de Educación y la nula inversión en infraestructura por parte del Gobierno de la Ciudad, no se puede estudiar», explicaron Angélica Graciano, Secretaria General UTE- Ctera; y Paula Galigniana, Secretaria de Comunicación, Prensa y Difusión.
«Es por ello que continuamos exigiendo el pase a la virtualidad para cuidar la salud de estudiantes y docentes, junto a dispositivos y conectividad para sostener el vínculo pedagógico a distancia», solicitaron.
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Desde el GCBA destacan que este mes lograron vacunar a todos los docentes y no docentes. Y Uspallata indica que solo quedan pendientes por inocular algunos remanentes que, por diferentes motivos, no se empadronaron; algunos porque se encuentran enfermos, otros porque se aplicaron también la vacuna antigripal.
También manifestaron que se detectó que «un 15% de la población objetivo no había completado el formulario de inscripción a pesar de estar habilitado. Una parte informó que ya había sido vacunada en otra jurisdicción, otra detalló que no se había inscripto por estar cursando alguna enfermedad y algunos indicaron que por haber recibido la vacuna antigripal hace menos de 15 días. Un porcentaje menor indicó que no quería recibir la vacuna por motivos personales».