Carlos Zinser, delegado de Laboratorios Craveri, empresa donde esta semana se registraron 43 despidos y luego fue arbitrariamente detenido un grupo de delegados por plantear su reincorporación, dialogó con Estado de Alerta en el marco de la masiva movilización gremial en defensa del trabajo y la producción.
El delegado explicó que si bien los 43 despidos se confirmaron el primer día de abril, en realidad los problemas en la empresa vienen de largo tiempo atrás, con “más de un año de incumplimientos salariales”, tiempo en el que se llegó a pagar el salario mensual en tres cuotas o con atrasos muy importantes (el sueldo de marzo se cobró el día 22).
En el contexto de la lucha por la reincorporación de los despedidos, los integrantes de la comisión interna se acercaron a la planta de calle Miranda para dialogar con el resto de los trabajadores, instancia en que la patronal llamó a la Policía. El gremialista relató: “Lo que ocurrió fue que en el día de ayer, al negársenos el ingreso a los establecimientos, cosa que no puede ser porque somos delegados y estamos amparados por fueros gremiales, la Comisión Interna ejerció el derecho que le corresponde. Entonces entramos, hicimos una asamblea en el comedor para sostener la medida de fuerza y viene la Policía y detiene a nuestros compañeros adentro del establecimiento, como en los peores momentos de la historia de nuestro país”.
Zinser además denunció que los cinco delegados detenidos luego fueron paseados por las fuerzas policiales por tres dependencias mientras se daban direcciones distintas sobre los traslados a los compañeros que se preocupaban por su paradero, generando profunda preocupación. En ese contexto, los delegados realizaron junto a los operarios de la planta “una convocatoria frente a las oficinas administrativas y gerenciales para reclamar por la pronta libertad de los compañeros y la reincorporación de los 43 despedidos”.
El delegado destaca que si bien es fundamental la lucha por la libertad sindical, este reclamo no debe hacer perder el foco respecto de los despidos. Al respecto, manifestó: “El día viernes tuvimos una audiencia en el ex Ministerio de Trabajo, actual Secretaría, donde la empresa no sólo no se presentó sino que hizo llegar una nota agraviante para la organización gremial, desconociendo a la audiencia como instancia para llegar a un acuerdo”. Zinser denuncia también que, además del ninguneo empresario, la propia Secretaría de Trabajo “se comportó como un apéndice de una oficina de los CEOS, de las patronales, y no dictó la conciliación obligatoria, cuando la empresa está invocando un Procedimiento Preventivo de Crisis (PPC) que no está homologado en el Ministerio y que no cuenta con el aval de la organización gremial”.
La comisión interna de Craveri denuncia que en esas circunstancias el procedimiento es “ilegal, ilegítimo e improcedente”, lo mismo que la intención empresaria de pagar el 50% de indemnización a los despedidos amparándose en el artículo 247 del PPC. El gremialista añadió: “Si hay alguien a quien llevar preso es a Juan Craveri, del directorio de la empresa, no a los trabajadores y delegados por ejercer el derecho legítimo de defender a los trabajadores representados. Ahora, si hay crisis hoy en día la estamos padeciendo los trabajadores y las trabajadoras y no las patronales que buscan ajustar y despedir trabajadores con antigüedad, derechos conquistados y categoría, para luego tomar personal contratado. Lo que están queriendo hacer es precarizar las condiciones de trabajo con el pretexto de la caída de las ventas”.
“Nosotros sabemos que los despidos no pasan solamente en Craveri sino que vienen ocurriendo en todo el país, por eso nos sumamos a esta movilización”, concluyó Zinser.
