Degradarían al Ministerio de Trabajo a Secretaría, como en la dictadura de Onganía

En el marco de la reestructuración del organigrama ministerial decidida por el Gobierno para intentar lidiar con la profunda crisis política y económica desatada en las últimas semanas, trascendió la posible eliminación de hasta 13 ministerios que serán fusionados o rebajados a secretarías. Así, el Ministerio de Trabajo hoy conducido por Jorge Triaca, pasaría a ser una secretaría dentro del Ministerio de Producción de Dante Sica. Desde su creación por Juan Domingo Perón en 1949, sólo la dictadura militar de 1966 tomó una media similar.

El actual Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social (MTEySS) fue creado en 1949 durante el primer gobierno de Perón, en el marco de su plan de reforma del Estado que también se expresó en la reforma constitucional del mismo año. Entre otros ministerios, se creó el entonces llamado de Trabajo y Previsión, cuyo primer titular fue el sindicalista José María Freire. De esta manera se elevaba a rango ministerial la Secretaría de Trabajo y Previsión, creada en 1943.

El octubre de 1966, la autodenominada Revolución Argentina, el golpe cívico militar que cuatro meses atrás había derrocado al presidente Arturo Illia para reemplazarlo por el general Juan Carlos Onganía, reorganizó el gabinete de ministros y degradó al Ministerio de Trabajo a la categoría de Secretaría de Trabajo de la Nación, dependiente del Ministerio de Economía y Trabajo. La decisión se revertiría en mayo de 1971, durante el gobierno también de facto del General Alejandro Agustín Lanusse, a través de la Ley Nº 19.064.

El gobierno de Mauricio Macri, en una decisión de claro sesgo empresarial, subordinaría a la cartera de Triaca al Ministerio de Producción de Dante Sica, uno de los ministros con los que Cambiemos pretende reactivar una economía nacional sumida en una profunda crisis. Los anuncios concretos se realizarán este lunes y aún no hay claridad sobre el lugar que ocupará Jorge Triaca en el nuevo esquema, más allá de las múltiples versiones que van desde un rol como secretario hasta una embajada en Europa.

Si bien todavía no hay declaraciones, es improbable que el sindicalismo argentino reciba con agrado la decisión de rebajar de categoría al Ministerio de Trabajo, considerado como uno de los grandes logros del primer peronismo.