El reclamo de igualdad del Peronismo y la posibilidad de tener los mismos derechos de quienes son las clases dominantes, las clases altas, han sido una de sus banderas, y ha plasmado en su obra artística el devenir del movimiento argentino más grande en cuanto a conquistas socio laborales.
En este caso, la pintura, principalmente, y también la literatura, son expresiones del proyecto revolucionario del Peronismo, que permanece ahí al alcance de todos para mostrar «la rebelión contra la injusticia». Es el caso de la obra de las «Evitas» que abrazan el edificio del Ministerio de Desarrollo Social en plena avenida 9 de Julio, corazón del centro porteño, o los murales de la calle Azopardo, la casa madre de la CGT.
Daniel Santoro, su autor, lo ponía en palabras en Estado de Alerta y afirmaba que «por el contrario de lo que se lo quiere acusar, el peronismo no proletariza, construye clase media”, pero sucede que “cualquier pequeña porción que se quiera poner en escena para el reparto y la redistribución, produce horror, moviliza todos los fantasmas del poder”, disparó el artista.
Ese es el motivo que los “abroquela”, señaló refiriéndose a la clase dominante, y lo atribuyó al “viejo enfrentamiento con el que siempre tiene que lidiar el Peronismo”; aunque a su entender, el movimiento «no viene a proponer otro mundo», sólo “quiere gozar del mismo mundo en el que gozan desde hace ya tiempo los sectores del poder”, al que consideró, “siempre restrictivo, siempre para pocos”.
De ese modo, “el incorporar a toda la masa popular al goce, al disfrute, a la vieja felicidad del pueblo, se generan los problemas, problemas que están ahora vigentes”, sintetizó Santoro, quien apuntó a que los sectores más opulentos ven “amenazada su libertad y ese es el fantasma que siempre agitan”.
En ese sentido señaló que, para el Peronismo, “si la libertad no está junto con la igualdad no tiene ningún sentido”, y allí les surge el “fantasma del comunismo” y lo ejemplificó con el DNU -sobre el servicio esencial de telefonía e internet-, al que los poderosos señalan «como un ataque a la libertad” y lo definen con la palabra grieta, a la que Santoro consideró una “mentira”.
Esa consideración falaz surge, según sus expresiones, de que no es posible una grieta porque «no hay una unidad que pueda agrietarse”, no hay un solo proyecto de Nación. Por el contrario, consideró que «nosotros hemos estado sujetos siempre a dos modelos de nación: uno que gana y uno que pierde».
“Nosotros -los peronistas- tenemos nuestro proyecto de Nación y vamos a ver lo que hay que hacer”, que en todo caso es “tender puentes y ver si se puede lograr un acuerdo, un equilibrio, una armonía –si querés- entre los dos proyectos” afirmó, aunque “ahora que podemos dialogar, lo evitan”, culpó a la oposición el creador de “Peronismo. Entre la severidad y la misericordia”, libro cuya autoría comparte con el filósofo, Julián Fava.
Daniel Santoro: «La propuesta de distribución del Peronismo moviliza todos los fantasmas del poder»
ó como la “resistencia contra el salvajismo neoliberal”.Audio Completo – Estado de Alerta – AM770