Este miércoles la regional Córdoba de la Confederación General del Trabajo (CGT), encabezada por José Pihen, y la Asociación Obrera de la Industria del Transporte Automotor (AOITA), dirigida por su Emiliano Gramajo, se pronunciaron sobre la actualidad del sistema de transporte público en la provincia y exigieron medidas concretas a las autoridades provinciales para reestablecerlo en base a la oferta y no a la demanda, mejorando la frecuencia y la seguridad de los servicios.
“Solicitamos al gobierno provincial que convoque a una mesa de trabajo multisectorial con participación gremial para abordar estas y muchas otras problemáticas que afectan al servicio público de transporte interurbano de la provincia”, sostuvo Gramajo.
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La CGT Regional de Córdoba afirmó que el reinicio de clases dejó al descubierto la escasez de frecuencias en el servicio de transporte público de la provincia, situación que no solo afecta a la comunidad educativa sino que también golpea a los choferes del transporte interurbano y a los usuarios en general. “Cada entidad gremial agrupada en esta central manifestó su gran preocupación por lo múltiples problemas laborales que esto genera”, expresó Pihen. Luego agregó que “los choferes son los receptores de los reclamos diarios, a menudo violentos, no siendo ellos los responsables del servicio público”.
Además, se remarcó que desde el comienzo de la pandemia un gran número de conductores no ha regresado al trabajo pleno, lo que motiva un reclamo de la Confederación en torno al “retorno pleno a la prestación del servicio y a la recepción íntegra de sus haberes, posibilitando que los conductores tengan sus puestos de trabajo garantizados y sus ingresos asegurados y, además, que los habitantes del interior puedan contar con un buen servicio ya que es público”.
En ese sentido, Gramajo remarcó: “Muchos usuarios se ven impedidos de desarrollar sus actividades con normalidad, sobre todos los habitantes del interior provincial que no cuentan con disponibilidad de horarios para trasladarse”. El dirigente también denunció que existe una enorme preocupación por las pésimas condiciones de seguridad, higiene y mantenimiento que en general presentan las unidades afectadas al servicio de transporte. Pihen, por su parte, concluyó: “Exigimos la urgente intervención de las autoridades provinciales para resguardar la vida y la salud de trabajadores y usuarios”.
