La segunda ola de Coronavirus golpea con fuerza a la provincia de Córdoba, que analiza restricciones a la circulación para contener los contagios. Pero decidió mantener las clases presenciales.
El ministro de Salud de la provincia, Diego Cardozo, estimó que en el curso de la próxima semana la provincia alcanzará el 80% de la ocupación de las camas críticas de coronavirus, por lo tanto «si eso ocurre vamos a analizar y tomar las medidas de restricciones que correspondan».
«Hoy tenemos casi 2.500 internados, que es un número muy importante y preocupante», manifestó el ministro Cardozo al precisar que esa cifra de internaciones representa el 73% del total de camas críticas Covid-19 para adultos que dispone la provincia.
En este duro contexto, el funcionario dijo que se están analizando todas las actividades y conductas sociales que representan «mayor transmisibilidad de la patología del coronavirus», particularmente medidas tendientes a bajar la circulación y mayores controles para evitar los eventos clandestinos, al sostener que «estamos en el momento más difícil de la pandemia, que supera ampliamente el pico de internaciones del año pasado».
En ese sentido reafirmó que Córdoba adhirió al DNU nacional que establece estrictas restricciones para el próximo fin de semana, con el objetivo de «resguardar la salud a nuestra gente» con la disminución de la circulación.
Pero el gobierno de Schiaretti mantendrá las clases presenciales, una decisión que no cayó bien en los docentes, que decidieron no retornar a las aulas y continuar trabajando bajo el modo virtual, como lo hicieron en la última semana.
El secretario gremial de la Unión de Educadores de la Provincia de Córdoba (UEPC), Oscar Ruibal, explicó que «el sistema de salud está colapsado por los elevados niveles de contagios», y aclaró que la decisión de su gremio «no se trata de una medida de fuerza. Lo que hemos resuelto es dictar clases pero con modalidad virtual y no presencial».
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Ruibal dijo que «todos los profesionales de la salud nos están diciendo que la situación sanitaria de Córdoba es grave y desaconsejan la presencialidad de las clases».
Asimismo, añadió que «no es correcto mirar epidemiológicamente al ámbito escolar como un todo». «La escuela es un ámbito físico que representa cuatro horas y en donde no se llega en un plato volador. El resto de las horas del día se transita por distintos espacios», manifestó el dirigente.
