Conflicto en UTA: Opositores a Fernández intentaron tomar el sindicato

No fue una jornada más para la UTA. El lunes por la mañana, un grupo de choferes de DOTA, de manera sorpresiva, llevaron a cabo un paro que no fue avalado por la conducción del gremio, lo que fue calentando el conflicto, hasta que por la tarde, un grupo de opositores a Roberto Fernández intentó tomar la sede del sindicato central.

El intento de toma no estuvo exento de violencia entre las facciones del colectivo gremial y la Policía de la Ciudad, que intervino para detener los disturbios. En ese contexto, los opositores alcanzaron a tomar el edificio, romper vidrios y destrozar varias oficinas, con cánticos contra Fernández. Producto de los golpes, al menos seis heridos fueron internados en el Hospital Ramos Mejía y varios manifestantes fueron detenidos.

“Este grupo de Dota me tomó el gremio. Lastimaron a todos. Estoy arriba del techo. Pasaron por arriba de la Policía. A lo mejor son las últimas palabras que te digo”, dijo Fernández, quien agregó: “Me está pasando esto porque no quiero lastimar a nadie. No es que no me puedo defender. Me estoy peleando con los míos para que no nos defendamos. Se metieron el gremio y me tomaron hasta el piso 4. Me rompieron todo”.

Paro sorpresivo de choferes del grupo DOTA: Más de 60 líneas de colectivo sin servicio

El referente de los opositores al liderazgo de Fernández es Miguel Bustinduy, ex dirigente de la UTA, quien consultado por el paro estableció que «el paro de 50 líneas de colectivos continuaba esta tarde por mejoras salariales y el rechazo a dos despidos de un trabajador de la compañía que tiene fueros gremiales», y señaló que «se impone de manera urgente una recomposición de los haberes porque ya no alcanzan para comer».

Esta medida de fuerza no contó con el visto bueno de la conducción opositora. Desde la Unión Tranviarios Automotor (UTA) aclararon que se trata de una medida de fuerza decretada por la empresa, que no cuenta con el aval del gremio.