El presidente Alberto Fernández adelantó que recién «a partir de marzo, se comenzará a discutir» la actualización de las tarifas de servicios, pero aseguró que la forma de salir del congelamiento no contempla la dolarización que provocó un fuerte desequilibrio durante la última gestión de gobierno.
Según el primer mandatario, será necesario buscar «los mejores mecanismos de corrección de las tarifas que hagan que las tarifas sean pagables para los argentinos», en referencia a un diseño de actualización en función de los ingresos de los distintos sectores sociales, y con una política de focalización de subsidios.
En ese sentido, agregó que «la pandemia ha dejado algo muy ventajoso, conocer la situación en la que está cada argentino», lo que se podrá concretar a través de las herramientas desarrolladas por la Estado nacional este año para llegar de mejor manera a los sectores más vulnerables.
La ley de emergencia denominada de Solidaridad Social y Reactivación Productiva sancionada en diciembre facultó al Poder Ejecutivo a mantener las tarifas de electricidad y gas natural que estén bajo jurisdicción federal y a iniciar un proceso de renegociación de la revisión tarifaria integral vigente o iniciar una revisión de carácter extraordinario.
En el contexto económico de inicio de la actual gestión y la posterior afectación de la pandemia sobre la actividad, el Gobierno confirmó el congelamiento de los servicios, por lo cual no entraron en vigencia los cuadros tarifarios previstos en la última revisión de los servicios de gas y electricidad de Cambiemos.
En similares términos, el secretario de Energía, Darío martínez, expresó en una reciente entrevista con Télam que el Gobierno nacional tiene la premisa de «no aumentar los subsidios en términos del PBI», en el proceso de focalizar la ayuda en el 40% de la población que entiende no está en condiciones de pagar el costo de la energía.
Se trata de avanzar hacia un nuevo esquema que será independiente del descongelamiento de las tarifas y que se deberá dar «sin generar recesión» en otros sectores.
Martínez también consideró que el sistema debería ir hacia «un esquema de tarifas de transición», que permita elaborar una nueva Revisión Tarifaria Integral (RTI) tanto para los servicios de luz como de gas.