La CGT, a través de su secretario general, Héctor Daer, sentado en la cabecera de la mesa, junto a las principales figuras del Gobierno, señala el lugar que el Ejecutivo pretende darle a la central obrera en su Gobierno en ésta etapa de convocatoria a todos los sectores para la «reconstrucción económica».
De hecho, este lunes, al finalizar el encuentro en el Salón de las Mujeres de la casa Rosada, aunque no hubo anuncios formales, fue el mismo Daer quien en rueda de prensa, ofició de vocero en un ronda de prensa y reivindicó la negociación paritaria como un diálogo social, “como una negociación responsable y transparente” en cada uno de los sectores”.
Siempre en materia salarial señaló que «nuestra negativa a acordar los años anteriores tuvo que ver con que el salario se iba perdiendo, no sólo que no se recuperaba, respecto al costo de vida, y esperemos en esta etapa tener una situación inversa y poder avanzar», analizó Daer, aunque el ministro de Economía había advertido que habría que “tener prudencia y ver la evolución de precios y salarios” en este contexto.
Uno de los objetivos del encuentro, era mostrar un grupo compacto frente a la llegada del FMI que arriba este mismo martes al país, y mantendrá diversas reuniones, -una de ellas con la CGT-, para tener el termómetro socioeconómico de la Argentina, en momentos donde debe iniciar las conversaciones con el Gobierno en busca de un acuerdo por la deuda externa.
Según el gremialista, «hay que materializar las cosas”, por ese tema consideró positivo “el desagregado de la articulación sectorial de cada una de las actividades”, lo que consideró “permitirá encontrar los caminos de reactivación lo más rápido posible para recomponer el salario, los ingresos, la recuperación en definitiva del empleo y de la economía», finalizó.
Junto a las cámaras empresariales, la Unión Industrial Argentina, la CTA de los trabajadores, los representantes de los movimientos sociales y finalmente el Consejo Industrial Argentino, a quien le llevó la invitación sobre la hora, comenzaron entonces una nueva etapa de reconstrucción económica que intenta aplacar la incertidumbre monetaria y establecer algunos lineamientos básicos para concretar el crecimiento y la expansión.
