El oficialismo de la Ciudad ya cuenta con un proyecto de ley para reducir ingresos brutos para los alquileres de los porteños y porteñas. Esta propuesta será debatida antes de fin de año y se espera consenso entre los distintos bloques que componen la Legislatura para que obtenga sanción.
La norma la realizó la diputada Lucía Romano (CC-ARI/Vamos Juntos) y dispone elevar el valor mensual a partir del cual las rentas por alquileres de hasta dos unidades de vivienda abonan el impuesto sobre los Ingresos Brutos en la Ciudad. La medida se resolvería a través de la modificación del actual artículo 22 de la ley Tarifaria. De esta forma quedarían exentos de pagar dicho impuesto quienes tengan propiedades en alquiler que no superen el nuevo monto, propuesto en $30.000.
La legisladora, e integrante de la comisión de Presupuesto, destacó que “hoy la ley Tarifaria vigente establece que los alquileres mayores a $6.700 pagan el impuesto, lo cual se encuentra absolutamente desfasado y distante de la realidad comercial y del mercado ya que el valor de los mismos supera ampliamente este número, por eso es necesario modificar esta ley para adecuarla a la realidad”.
“La espiral inflacionaria de nuestro país ha dejado absolutamente obsoleto el monto a partir del cual los alquileres deben pagar el impuesto. A modo de ejemplo basta mencionar que en el año 2019 los precios de los alquileres subieron en promedio 25% mientras que la inflación anual acumulada fue del 53,8%, es decir que en relación con la inflación el precio de los alquileres aumentó sólo la mitad. Para el corriente año la inflación estimada, según el último informe del Relevamiento de Expectativas del Mercado (REM), a cargo del BCRA, se estima del 39 % aproximadamente”, señaló.
Extienden el congelamiento de alquileres y la prohibición de desalojos
“No debemos dejar de tener en cuenta los principios constitucionales aplicables a la materia tributaria de Capacidad Contributiva y Razonabilidad, como esencia de los tributos y como límite a la potestad tributaria del Estado. En ningún caso el tributo o conjunto de tributos que recaiga sobre un contribuyente puede exceder la razonable capacidad contributiva de las personas, ya que de lo contrario se está atentando contra la propiedad, confiscándola ilegalmente” señaló Romano y manifestó que “en un contexto de crisis económica debemos tomar medidas para aliviar a las personas que ya tienen una fuerte carga tributaria”.
La legisladora destacó que “la rentabilidad de los alquileres ha ido cayendo año tras año. En el tercer trimestre del 2019 tuvo una caída del 30% con respecto a idéntico período de 2018, y un 54% con respecto al mismo trimestre de 2017.Actualmente la renta bruta para un dueño que alquila un departamento usado de dos ambientes (unos 45 metros cuadrados) es de un 2,42% anual, en promedio. Para muchos la caída de la rentabilidad coincide con la merma o el cese de ingresos dado el contexto de crisis económica por eso no adaptar los montos al contexto actual significa no darle alivio a un sector que viene siendo perjudicado. La compra de propiedades para alquiler destinadas a viviendas es un tipo de inversión muy común para la clase media con el objetivo de tener un ingreso adicional a sus sueldos o haberes previsionales con el fin de lograr una mayor estabilidad económica”.