La principal planta de fabricación de IPhone en China, del gigante tecnológico taiwanés Foxconn, registró violentas protestas de sus trabajadores este miércoles, que reclamaron aumento salarial y mejores condiciones laborales. Cientos de empleados incluso se enfrentaron con la policía antidisturbios.
La situación, además, se agrava en el marco de la política de “Covid cero” que mantiene China, sosteniendo duras restricciones a la movilidad, cuarentenas, confinamientos y estrictos protocolos contra el coronavirus, lo después de casi dos años viene generando un fuerte cansancio en la población. En las últimas semanas, Foxconn había registrado un aumento de los casos de Covid en su planta de Zhengzhou, lo que llevó a la empresa a funcionar con la lógica de “burbujas” en su inmenso complejo de más de 200 mil trabajadores y finalmente a definir un cierre temporario. Una gran cantidad de trabajadores contagiados fueron alojados en instalaciones de la empresa, en condiciones muy cuestionadas.
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Desde Foxconn reconocieron que los trabajadores de su planta china (la mayor productora de IPhone del mundo) reclamaron por salarios y las condiciones de trabajo, pero negó haber alojado a los nuevos trabajadores junto al personal infectado de coronavirus en la fábrica. Y agregaron: “En lo que se refiere a la violencia, la compañía seguirá comunicándose con los empleados y el gobierno para evitar que se repitan incidentes similares”.
Apple reconoció hace pocos días que el cierre de la planta de Foxconn había “afectado temporalmente” la producción de IPhones. Foxconn hoy es el mayor empleador del sector privado de China, con una plantilla de más de 1 millón de personas en unas 30 fábricas e institutos de investigación.