Tanto la Confederación General del Trabajo (CGT), como la Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte (CATT) cuestionaron fuertemente el proyecto de desregulación lanzado por el gobierno nacional.
Ambas confederaciones hacen foco tanto en la precarización laboral, como en la seguridad de pasajeros y trabajadores de la actividad, solidarizándose explícitamente desde el Consejo Directivo de la CGT, con los reclamos planteados por el gremio taxista, señalando que así se “habilita una práctica peligrosamente irregular, autorizando la circulación de vehículos sin controles ni seguros, conducidos por choferes sin capacitación, poniendo en alto riesgo de vida y seguridad a las y los potenciales usuarios”.
Denunciando que “bajo el falso argumento de mayor libertad, lo que se busca es profundizar el modelo de empleo precarizado, sin derechos laborales, bajo la consigna del emprendedurismo y sin responsabilidad social ni empresarial”.
Paralelamente, la CATT emitió un comunicado, donde describe el actual contexto como “de creciente inseguridad y descontrol, donde la desregulación del transporte pone en riesgo la integridad de pasajeros y trabajadores del sector”, permitiendo “la proliferación de servicios irregulares y no autorizados, que no cumplen con las normas de seguridad y calidad
establecidas”.
En este sentido, tanto Juan Carlos Schmid (FeMPINRA) y Juan Pablo Brey (Aeronavegantes), Secretario General y Secretario de Prensa de la CATT respectivamente, argumentaron que “según datos de la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV), en 2022 se registraron 5.544 accidentes de tránsito en Argentina, con un total de 7.313 heridos y 1.044 muertos.
Estos números son alarmantes y demuestran la necesidad de una regulación y control efectivos del transporte”. Y agregaron: “Nos preocupa la situación del transporte de pasajeros por carretera. Según la Ley Nacional de Tránsito (Ley 24.449), los vehículos de transporte de pasajeros deben cumplir con normas específicas de seguridad, como la
instalación de cinturones de seguridad y la realización de revisiones técnicas periódicas”.
Por otro lado, los gremialistas también manifestaron su preocupación respecto a “la situación del transporte de carga terrestre, que requiere una regulación y control efectivos para garantizar la seguridad en las carreteras y la protección de la carga, según la Resolución 195/2019 de la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV)”.
En esta línea, hicieron referencia a la situación crítica que atraviesan los taxistas: “Igualmente nos preocupa la situación de los trabajadores de taxis, quienes enfrentan una creciente competencia desleal por parte de servicios irregulares y no autorizados. Reiteremos instrumentar una regulación efectiva que garantice la seguridad y la calidad del servicio para los pasajeros, y proteja los derechos laborales de los trabajadores de
taxis”.
Además, se refirieron a las problemáticas de la actividad aeronáutica “que requiere una regulación y control estrictos para garantizar la seguridad de los pasajeros y los trabajadores del sector. Según la Ley Nacional de Aviación Civil (Ley 26.322), los operadores aéreos deben cumplir con normas específicas de seguridad, como la realización de revisiones técnicas periódicas y la capacitación de los tripulantes”.
Finalmente, algunas de las medidas que exigieron desde la CATT son las siguientes: “La implementación de un sistema de regulación y control efectivo del transporte”; “La aplicación de sanciones severas a los servicios irregulares y no autorizados”; “La inversión en infraestructura y tecnología para mejorar la seguridad y la eficiencia del transporte”; “La
protección de los empleos y condiciones laborales de los trabajadores del transporte”; “La regulación efectiva de la actividad de taxis y la protección de los derechos laborales de los trabajadores de taxis”; “El fortalecimiento de las normas y los controles para garantizar la seguridad aeronáutica y la protección de los derechos laborales de los trabajadores del sector aeronáutico”; y, por último, “La implementación de medidas para prevenir la sobrecarga y el transporte irregular de mercaderías en el transporte de carga terrestre”.