La multitudiaria toma de tierras en Guernica se ha convertido, por lejos, en el principal foco de conflictividad social en la provincia de Buenos Aires, principalmente por la complejidad de un tema en el que ya interviene la Justicia y que aún no encuentra con garantías para un desenlace pacífico.
Fue la misma Blanca Cantero, intendenta de Presidente Perón, distrito de la toma, quien espera que el desalojo sea “lo antes posible” e hizo una síntesis de la situación, que en principio, permanecerá por dos semanas más, a pedido del gobierno provincial, quien logró persuadir a la Justicia para prorrogar la fecha de desalojo por parte de la policía.
Será el 15 de junio entonces el momento decisivo. Mientras tanto ya hay negociaciones y decenas de familias están dejando el lugar en el que hay unas 1900 personas que permanecen en sus precarias viviendas a la espera de las soluciones habitaciones que reclaman.
A contramano de ello, la realidad que plantea Cantero al respecto es que “desgraciadamente hay gente que no va a la toma en busca de una solución habitacional” y “es un error decir que hay gente en situación de calle” ya que es “muy poquita la gente en situación de calle de acuerdo a lo que nosotros estamos atendiendo con los ministerios de la provincia de Buenos Aires”, lo que desmiente al mismo Censo realizado para detectar las problemáticas existentes, donde el 40% declara no tener techo.
“Más allá de lo declarado”, luego se debe constatar la real situación “si es hacinamiento o no” porque hasta el momento de la toma «no había personas en situación de calle en Presidente Perón”, y eso no es lo mismo que “una pareja con 10 años de convivencia en la casa de algún familiar que intenta tener su casa o tiene un terreno chiquito y busca uno más grande”; de esos hay muchos casos, aseguró Cantero.
La premura de la jefa comunal tiene que ver con el reclamo ciudadano de su municipio. “Porque, según dijo “no es color de rosa”, es difícil aceptar que «debe destinarse parte de la seguridad para evitar distintos tipos de problemas, poner personal policial a los dueños de la tierra, a los que viven ahí porque se ven amenazados, tienen miedo que les le quemen la casa, se las usurpen o les roban los animales”, explicó describiendo una situación tensa por demás con los pueblerinos del lugar.
Lo cierto es que, según dijo, hay responsabilidad de «movimientos sociales», en la organización de la toma, no es que la gente fue llegando individualmente” y ejemplificó: “una vez fueron 200 personas que se desalojaron y después al otro día eran entre 400 y 500 personas y luego entraron por varios ingresos simultáneos hasta conformar la toma tal como es hoy de más de 100 hectáreas.
Cantero destacó su buena relación con el gobierno de Axel Kicillof, quien anunció medidas que van a beneficiar a todos los que necesitan una solución habitacional pero marcó sus diferencias “con las organizaciones sociales de izquierda” con las que dijo “yo no tengo mucha relación porque políticamente nunca trabajé al lado de ellos” y denunció que “cada vez que hay una movilización, llegan en tren y bajan unas 30 o 40 personas con bolsos y son las que organizan las protestas”.
La esposa del secretario general de la CGT, Carlos Acuña, dijo “estar del lado de los humildes” pero se refirió también a su responsabilidad sobre la situación y reiteró “no poder resolver una situación de décadas en 8 meses de gobierno” que implica “una solución para gran parte del conurbano”, y agradeció la colaboración de los intendentes que están trabajando en conjunto para reubicar a las familias a las que se les acortan los plazos para dejar las tierras tomadas, que según aseguró “no son tierras del Estado, son tierras de privados que hay que respetar, y garantizar que se cumpla la ley”.
Audio completo – Estado de Alerta – AM770 Radio Cooperativa
