Basf y Axalta dejan de producir pinturas en el país y se pierden 250 puestos de empleo

Son empresas fabricantes de pinturas para autos  que se mudarán a Brasil. La alemana mudará la fabricación al estado de San Pablo pero continuará operando comercialmente en el país mediante importación. En cambio, la estadounidense anunció que se retira del mercado local de forma definitiva. .

La reducción de la operatoria de Basf y el cierre definitivo de Axalta afectarán no solo a los empleados directos sino también a los proveedores que dependen comercialmente de ellas, unos 250 puestos de trabajo.

Ambas anunciaron que  dejarán de producir en el país producto de la crisis provocada por la pandemia tanto a nivel local como mundial. Es una muestra de que además del cierre de pequeñas y medianas compañías, también la crisis afecta a fábricas de gran tamaño.

En el caso de la firma alemana Basf, trasladará a Brasil parte de la producción de su fábrica ubicada en el municipio bonaerense de Malvinas Argentinas y continuará con algunos negocios pero lamentablemente serán a través de la importación y no de la producción.

El esquema productivo de la firma alemana será reemplazado por un modelo de importaciones pero implicará mantener abierta la fábrica de Tortuguitas. Allí continuará funcionando la estructura comercial y administrativa. A su vez el negocio vinculado a repintura y de químicos para el cuidado personal y del hogar continuarán operando en Argentina.

Por otra parte, debido al fuerte vínculo comercial que mantiene con la industria automotriz local, informaron que en el país seguirá trabajando una estructura técnica en conexión con las terminales de autos.

El traslado de la producción a Brasil impactará directamente en 60 puestos laborales que Basf emplea en la planta de Malvinas Argentinas. Se trata de colaboradores de producción de pinturas automotrices como también de otras posiciones y servicios involucradas en el proceso de fabricación.

Más grave aún es el caso de Axalta. La compañía de capitales estadounidenses informó que “se ha visto forzada a cesar operaciones en Argentina debido a la situación económica actual en el país y por el impacto causado por COVID-19” y lamentaron la “difícil para los empleados y sus familias afectadas por esta situación”.

Si bien en el país rige por Decreto de Necesidad y Urgencia la prohibición de despidos y al mismo tiempo la doble indemnización desde el comienzo de la pandemia, esto no impidió a empresas de distintos rubros optar por el cierre de las operatorias a nivel local y reducir puestos laborales.