Este jueves la Asociación Trabajadores del Estado (ATE) lleva adelante un paro con movilizaciones en distintos puntos del país. El reclamo es por salarios, mejores condiciones laborales y por la “amenaza de una tercera ola de despidos masivos a fin de mes”, con el vencimiento de miles de contratos en la administración pública. En Ciudad de Buenos Aires la movilización será a Plaza de Mayo y se realizará en forma conjunta con la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP). En CABA el paro incluirá “cese de tareas, retiros de los lugares de trabajo a partir del mediodía y una olla popular frente a la Casa Rosada”, mientras que en el resto de las provincias se definirán puntualmente las modalidades de protesta y las organizaciones con las que se llevarán adelante.
El titular de ATE Rodolfo Aguiar manifestó: “Es muy importante para los estatales saber que no estamos solos en esta lucha tan difícil contra un Gobierno que quiere exterminarnos. Por estas horas crece la conflictividad y también los niveles de unidad de los trabajadores en todo el país. Mañana vamos a frenar la intención del Gobierno de seguir despidiendo a miles de trabajadores”.
Ante la amenaza de otra tanda de miles de despidos en el Estado nacional, Aguiar manifestó: “Tenemos que pasar de la resistencia al ataque para evitar nuevas cesantías masivas a fin de mes. El Gobierno que hace nueve meses nos declaró la guerra no pasa por su mejor momento, y nosotros tenemos que seguir golpeándolo”. Y explicó: “Son casi 65 mil los contratos que vencen a fin de mes. No vamos a tolerar una sola cesantía ilegal más. Por estas horas no pueden disimular la pérdida de apoyo popular que ha tenido el presidente y su gestión, deslegitimación a la que en buena medida hemos contribuido los estatales estando incesantemente en la calle desde el 10 de diciembre”.
Respecto de las negociaciones salariales, en las que el oficialismo ofreció un incremento de 3% para el bimestre septiembre-octubre (propuestaque fue aceptada por UPCN y rechazado por ATE), consideró: “No es novedad que intentan congelar nuestros salarios. La última paritaria fue la peor que hemos tenido durante los últimos años. Este paro no sólo es para rechazar una nueva ola de despedidos, si no para exigir la inmediata reincorporación de todas las trabajadoras y los trabajadores que han sido despedidos, para que se reabra la paritaria y se otorgue un aumento salarial que nos permita recuperar todo lo que hemos perdido durante los últimos ocho meses”.