Debido a la crisis mundial ocasionada por la pandemia del coronavirus, y en particular por la paralización de la actividad aérea, Aerolíneas Argentinas se fusionará con Austral en una sola compañía, decisión que ya fue anunciada por el presidente de la aerolínea de bandera, Pablo Ceriani.
Este dos en uno significará «reinventarse» también en cuanto a su funcionamiento, de lo cual se sabe que además la nueva compañía unificada realizará “reparaciones de aviones y envío de cargas y encomiendas”.
Desde distintos ámbitos gremiales señalaron que acompañarán la fusión, y se ve como algo necesario “para fortalecer la empresa estatal y mejorar la gestión”. Es el caso de la Asociación de Personal de Técnicos Aeronáuticos, quienes señalaron que “es una forma de cumplir con un reclamo histórico, pues hace 28 años que APTA propone transportar carga pura, e impulsar la realización de trabajos a terceros en el área técnica, como posibilidad de ser una fuente de trabajo y de ingreso”.
En cuanto a qué implicar tercerizar, desde el gremio que encabeza Ricardo Cirielli manifestaron que sería “realizar mantenimiento a otras empresas, que se utilicen los talleres y hangares para reparar y aviones de otras compañías”, lo que diversifica las posibilidades de funcionamiento y cuando a uno «no le va bien, como con el transporte de pasajeros durante el Covid19, funciona lo demás».
Pero al respecto también sugirió definiciones en cuanto a los detalles de “lo que harán y cómo” para acordar lo que resultará de la letra chica de esa fusión que por ahora incluye muchos interrogantes pero que avizora al menos una salida para “aviones que hoy permanecen en tierra sin operaciones regulares y con caída total de los ingresos por tiempo indeterminado”.
Por su parte, Ceriani explicó que la fusión responde a que “el Estado debe definir nuevas prioridades respecto al funcionamiento de la aerolínea de bandera para la que se necesita una adaptación y una nueva forma de funcionamiento”, ya conscientes de que cientos de compañías en el mundo desaparecerán.
«Vamos a crear dos nuevas unidades de negocios: una de cargas, a partir de la experiencia de los vuelos a Shanghái, y otra de mantenimiento y reparación de aviones, para prestar servicios a terceros. Ambas permitirán incrementar la facturación y abrir nuevos mercados», sostuvo el titular de la línea aérea de bandera, en coincidencia con la oportunidad que ven los gremios, y que seguramente evitará males mayores, pero que todavía conlleva muchos interrogantes al respecto.