Luego de una auditoría técnica, jurídica y económica sobre las tarifas y sobre los concursos de directores del ENRE que reveló que en la gestión de Macri existieron «manifiestas irregularidades» y “vicios graves” en varios procedimientos, ex secretarios de Energía salieron al «ataque» de la intervención del organismo.
Por tal motivo, desde la Asociación del Personal de Empresas de Energía (APSEE) y con su firma, el secretario general de la entidad, Carlos Minucci, alzó la voz nuevamente para denunciar otra “operación”, ésta vez contra quienes criticaron la intervención de los Entes Reguladores y consideró que “intentan poner fin a los mismos” una vez que felizmente “cuentan con el aval del Ejecutivo para negociar con las empresas Tarifas y Calidad de Servicios, aplican sanciones cuando no se cumple con lo establecido en los contratos de concesión y están a favor del cliente: lo atienden, están convocando a Audiencias Públicas para dar participación y transparentar los avances en las negociaciones”.
En carácter de “trabajador de una empresa eléctrica destruida por aquellos paladines defensores de los intereses contrarios al Estado”, Minucci se mostró sorprendido por la reacción de los ex funcionarios en su “reaparición nuevamente en favor de los intereses monopólicos” y en contra del “servicio público y de sus usuarios”, reprochando lo que han hecho durante sus gestiones y en los últimos cuatro años del gobierno anterior, donde provocaron «la destrucción de las empresas del sector”.
En ese sentido, valoró el rol de control sobre las empresas concesionadas que están llevando adelante los Entes y el “freno a la impunidad de los años 90”, donde las empresas “se deterioraron por falta de inversión, vaciamiento de personal especializado, mala atención y mal servicio a los usuarios”, un combo que no impidió “subas siderales de las tarifas de casi un 3.000%”, cifras que resultan “impagables», agregó.
Por eso, el referente gremial, frecuente denunciante de éstos males, volvió a disparar contra el “atropello” y la “falta de respeto a las leyes” que durante “épocas” permitieron “espectaculares negocios”, incurriendo como mínimo “en un conflicto de intereses” como “el nombramiento de Chambouleyron”, del Ing. Bastos, o del nuevo titular de Edenor, todos con gestiones “plagada de irregularidades”, finalizó.