Después de que tanto empresarios como usuarios particulares cuestionaran la facturación de “consumos estimados” por parte de las distribuidoras eléctricas de todo el país, el Ente Nacional Regulador de la Energía (ENRE) emitió una serie de resoluciones para evitar este tipo de abusor por parte de las empresas de energía.
Este martes los empresarios Pyme integrantes de la Confederación General Empresaria de la República Argentina (CGERA) habían cuestionado públicamente el cobro de “consumos estimados” por parte de las compañías eléctricas durante el período del aislamiento social, preventivo y obligatorio, en el cual muchas de estas Pymes tuvieron que paralizar la producción.
Guillermo Siro, dirigente de CGERA y Presidente de la Confederación Económica de la Provincia de Buenos Aires (CEPBA), denunció: “Una vez más las posiciones dominantes dentro de nuestra cadena de valor están asfixiando a comercios e industrias bonaerenses ya que las empresas de servicios eléctricos están aplicando criterios netamente recaudatorios e inexactos”. Y añadió: “Debido a que no mandan gente a controlar los medidores, están utilizando las facturas y los valores en los sectores productivos, industriales y también domiciliarios de los meses en los que había actividad sin tomar en cuenta que desde marzo 70% de comercios y fábricas no han tenido actividad ni consumo”. Siro anticipó una presentación ante los organismos regulatorios para que no se cobren “estas facturas inexactas y abusivas” o para que “se suspenda el cobro hasta que puedan controlarlo o que cobren el consumo real”.
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Norberto Fermiani, también dirigente de CGERA y Presidente de la Cámara Argentina de la Industria Óptica (CADIOA), denunció que “hace ya casi 50 días que estamos en cuarentena con las empresas paradas y los mínimos que te cobran de la luz son terribles”. “Deberían hacer algo y cobrar sólo el consumo real porque es inverosímil tener que pagar 100.000 pesos de básico de consumo con las luces totalmente apagadas. Tenemos las fábricas paradas y estamos pagando fortunas de mínimos de consumo”, insistió.
En respuesta a estos planteos, así como al reclamo de miles de usuarios particulares en redes sociales, este miércoles el ENRE por un lado aprobó la resolución 27/2020, que puntualmente instruye a Edenor y Edesur para que realicen la estimación del consumo de usuarios residenciales utilizando el menor registro de consumo correspondiente al mismo periodo de estimación de los últimos tres años. Esta lógica continuará vigente hasta que se normalice la lectura de medidores. También se instó a las concesionarias a que refuercen los canales de atención y comunicación para que los usuarios puedan impugnar sus facturas.
Por otro lado, el ente de control también obligó a las dos mayores distribuidoras de energía de la Ciudad de Buenos Aires y buena parte del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) a facturar el consumo real a Pymes e industrias en general, habilitando la lectura de medidores para los usuarios categoría T2 y T3, con el aval del Ministerio de Desarrollo Productivo. Desde el ENRE también se establecieron protocolos sanitarios específicos y se intimó a las empresas al estricto cumplimiento de las instrucciones sanitarias y de seguridad de las autoridades nacionales y de cada jurisdicción.
En relación con las Pymes e industrias que hayan recibido facturas con consumos estimados que presenten diferencias respecto del consumo real, se habilitó la impugnación de la factura ante la empresa distribuidora, que deberá refacturar en base al consumo real.
