Según un relevamiento realizado por BAE Negocios, las cadenas de hipermercados, supermercados provinciales, almacenes y centros mayoristas siguieron aumentando fuertemente el precio de alimentos y productos de limpieza.
En medio de la fuerte recesión económica y pese a las promesas oficialistas de que la inflación iba a comenzar a retroceder en el primer trimestre del año, alimentos y productos de limpieza sufrieron una remarcación de hasta 25% en el primer mes del año.
La empresa que más aumentó sus precios en los últimos días fue Unilever (productos de limpieza), con un incremento de 12%, seguida por Molinos Cañuelas (10%) y SC Jonhson (10%). Las cervezas y gaseosas sumaron un 8% en promedio y los fideos un 5%.
Esta tanta de aumentos se suma a otra de mediados de mes, donde Molinos Cañuelas ya había remarcado 15% la harina y el pan rallado, Coca Cola un 14%, Papelera del Plata (pañales y papel higiénico; servilletas y rollo de cocina) 7% y vinos Peñaflor, 5%. Así, la harina, que el año pasado fue uno de los productos que más aumentó, acumuló un 25% más sólo en enero.
Los aumentos no tienen una justificación vinculada con ningún objeto específico sino que se argumentan ajustes pendientes del año anterior, lo que comúnmente se conoce como “inflación reprimida”, vinculada en algunos casos a los saltos del dólar o al incremento de insumos como el plástico.
La decisión de aplicar nuevos aumentos tomada por empresas nucleadas en la cámara Copal hace tambalear las afirmaciones del ministro de Producción y Trabajo Dante Sica, que en diciembre aseguró que “en los próximos meses los precios se desacelerarán”. Particularmente los aumentos de bienes de primera necesidad como harina o fideos, más algunos productos de higiene personal, implica un nuevo golpe al bolsillo de los asalariados al tiempo que un alerta rojo para las expectativas oficiales de descenso de la inflación.