La ola de frío que atraviesa el país afecta especialmente a la gente en situación de calle. Por lo menos en la Ciudad de Buenos Aires, organizaciones sociales calculan que ya son 7000 mil las personas que están a la intemperie en los barrios porteños en el marco de un intempestivo aumento de la desocupación, que es del 10,1%, es de decir casi 2 millones de seres huymanos están desocupados.
Además, las organizaciones sociales estimaron que la gente en situación de calle pasó de 4394 personas en 2016 a 7251, es decir, este flagelo creció un 65% en la era Macri. Mientras en 2017 había 5872. Es un número seis veces más alto que el que que mide la Ciudad. Para el gobierno porteño, en la actualidad hay 1146 personas viviendo en las aceras.
Ese número oficial representa un 5% más que lo registrado en el relevamiento de 2018, pero si se compara con 2016 (primer dato proporcionado por la administración Larreta) la cantidad de personas en esta situación creció un 32% en tres años. Mariel Reco, titular de la Asociación Ni una Persona Más en la Calle, apuntó que los agentes porteños hacen la recorrida para el censo en un horario determinado -durante el día- que es cuando mayormente las personas están caminando o cartoneando. «Nosotros hacemos el relevamiento después de las 20.30, que es cuando se tiran a dormir a los lugares habituales donde están».
Además, aseveró, que la Ciudad no considera en su sondeo a los que están en los paradores. «No es que hay un lugar fijo y permanente para esa persona que quedó sin hogar, por eso nosotros los contemplamos y los tomamos como en riesgo de situación de calle». Suman más de 20 mil las personas en este contexto en el que ONGs, clubes y actores de la sociedad civil convocaron por redes sociales a donar y ayudar para que la gente no muera de frío.
Se abren más albergues, parroquias, clubes,
escuelas y universidades; para las personas en situación de calle.
Se cumplieron 72 horas sin fallecimientos por hipotermia.— Juan Carr (@HambreCero) 5 de julio de 2019