Después de que durante la tarde del viernes el Ministerio de Salud anticipara el cierre del Hospital Nacional en Red “Licenciada Laura Bonaparte”, especializado en salud mental y consumos problemáticos, los trabajadores de la institución tomaron el edificio y convocaron a un abrazo solidario y a una conferencia de prensa para este lunes.
Desde la junta interna de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) en el nosocomio explicaron: “Semejante decisión no sólo atenta contra la fuente laboral de más de 600 trabajadores de la salud sino, fundamentalmente, contra miles de pacientes que se atienden en sus distintos servicios: internación, guardia, consultorios externos (adultos, niños y adolescentes), hospital de día, odontología, clínica médica, kinesiología, entre otros”.
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“Vamos a sostener la permanencia en el edificio hasta que nos digan qué van a hacer”, añadieron. Además, explicaron que la institución provee de manera gratuita los psicofármacos que necesitan los pacientes, por lo que una interrupción total de este tipo puede ser considerada casi como “una sentencia de muerte”.
Desde la cartera de Salud, que encabeza el recientemente designado Mario Lugano, afirmaron que “no hay marcha atrás” en la decisión. Y detallaron, enfatizando los criterios de productividad y de mercado: “Hay 612 empleados y tienen un promedio de 16 internados, cuando hay camas para 50 personas. Sabemos que la reestructuración no va a ser una tarea sencilla, pero los números no dan. No hay una demanda porque está cubierta por otras instituciones”.
Los referentes gremiales del hospital desmintieron los datos de Salud, afirmando que hay cerca de 40 pacientes internados en la actualidad y que la guardia tiene movimiento constante. Camacho detalló: “Hay 1000 pacientes en consultorios externos y eso escala a 2500 o 3000 atenciones mensuales. A eso hay que sumarle las internaciones y todo lo que tiene que ver con problemáticas de salud mental de niñas, niños y adolescentes, que es atención ambulatoria”. Durante todo el fin de semana, mientras se mantenía el hospital ocupado, se llevaron adelante asambleas para planificar las medidas de defensa de la institución.
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También manifestaron su repudio desde la Asociación Argentina de Salud Mental (AASM), enfatizando su “profunda preocupación y su más enérgico rechazo” ante el anuncio de cierre y destacando que la decisión “se enmarca en una serie de acciones descabelladas, irracionales, absurdas y crueles por parte del gobierno nacional”. “El Hospital Bonaparte es el único dispositivo nacional dirigido a personas con padecimiento mental en el territorio de la Ciudad de Buenos Aires que brinda abordaje a personas en con problemáticas de salud mental, en situación de calle y demás grupos vulnerables y, que, se encontraba realizando una trasformación enorme de la lógica de intervención manicomial hacia otra comunitaria y con perspectiva de derechos en consonancia con los lineamientos de la Ley Nacional de Salud Mental y organismos internacionales”, agregaron.
En este marco, desde ATE se convocó a un “abrazo solidario” al hospital desde las 7 de la mañana de este lunes, invitando a participar a “organizaciones y personalidades de todo el arco sindical, político, social, cultural, de DDHH, asambleas barriales y a toda la comunidad”. Además, a partir de las 11 se brindará una conferencia de prensa en “defensa de nuestro hospital en particular y de la salud pública en general”.
En las últimas horas, tras una presentación del trabajadores del hospital y del Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS), el Juzgado Criminal y Correccional 44 le exigió al Ministerio de Salud que presente información detallada sobre el cierre de los servicios del hospital en un plazo de 24 horas, para informarse sobre el asunto y garantizar la continuidad de la atención a los pacientes internados.
