El presidente venezolano Nicolás Maduro, a pocos días de asumir un nuevo mandato, confirmó un aumento del 300% del salario mínimo, dentro de un paquete de medidas destinadas a dar algo de alivio a la población golpeada por la difícil situación que atraviesa el país. Sin embargo, los pronósticos inflacionarios para el año podrían alcanzar las 8 cifras, según el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Durante la presentación de la “Memoria y Cuenta” de 2018, el líder chavista cargó contra los Estados Unidos por la guerra financiera contra Venezuela y aseguró que 2019 será el año de la estabilización económica del país: “Sopla tempestad que tengo pueblo, que tengo Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB), tengo Asamblea Nacional Constituyente y tengo historia para maniobrarte”. Y agregó: “A cualquier otro país, todos esos ataques que sufrimos nosotros los hubiera hecho sucumbir. A nosotros nos hizo más fuertes. La oligarquía colombiana y Washington han cometido un crimen de lesa humanidad con nuestra economía. Imperialismo: quédate con tus sanciones que los venezolanos y las venezolanas saldremos adelante”.
En su balance, reconoció que 2013 y 2018 hubo una caída del 94% de los ingresos petroleros de Venezuela, pero aseguró que así y todo se aumentó la inversión social en áreas como salud, educación y tecnología. El presidente venezolano hizo un llamado a los empresarios locales para que acompañen la nueva apuesta económica del oficialismo y defendió el modelo económico venezolano, descartando que sea “enemigo de la empresa privada”. En ese sentido, detalló: “Nuestro modelo es mixto, donde las empresas estratégicas están en manos del Estado. Yo no soy ni un capitalista ni un neoliberal, pero tampoco soy un obtuso. Aquí nadie venga a creer que vamos a privatizar. Pero si puedo traer asesoría e inversión extranjera lo debemos conseguir”.
Con aumento anunciado, el salario mínimo pasa de 4.500 a 18.000 bolívares mensuales (20,8 dólares a la tasa oficial), pero la hiperinflación nacional no parece encontrar techo. Según el pronóstico del FMI este año podría llegar al 10.000.000%. Otra de las medidas anunciadas fue el incremento del valor del petro, la criptomoneda lanzada en 2019 para intentar contrarrestar el bloqueo económico extranjero, lo que para muchos analistas anticipa una nueva devaluación de la moneda. Hace apenas algunos meses se aplicó un plan de reformas económicas que le quitó cinco ceros al bolívar, aplicó un aumento de 3.400% del salario mínimo y una devaluación de 96%.
En su discurso, Maduro anticipó una producción de 5 millones de barriles de petróleo y cargó contra la corrupción y las mafias en la administración pública (particularmente en la estatal Petróleos de Venezuela). Para concluir, comparó la encrucijada venezolana con la situación en Argentina y Brasil: “¿Podría la derecha, si ganara, conservar los logros y llevar al país a un futuro de bienestar? Ahí tienen el ejemplo de Argentina, le bajaron las pensiones a los viejitos, se endeudaron como no se hacía en años. En Brasil tienen a Bolsonaro, que es un Hitler de los tiempos modernos. Ahí está, privatizando el petróleo”.
