El Centro de Patrones y Oficiales Fluviales, de Pesca y de Cabotaje Marítimo, junto a gremios marítimos, fluviales y pesqueros, se manifestaron este martes frente al Congreso Nacional, mientras el plenario de comisiones del Senado trata la Ley Ómnibus que impulsa el Gobierno de Javier Milei, que incluye una brutal reforma laboral, la delegación de facultades y el paquete fiscal que contempla el retorno de la cuarta categoría del Impuesto a las Ganancias, además de una exención de tributos para Inversiones y blanqueos de capitales que destruyen el tejido industrial argentino.
“Disfrazan de esperanza lo que en realidad es la destrucción del futuro de todos los argentinos”, remarcó el secretario general del gremio, Mariano Moreno. El dirigente también anticipó una nueva movilización al Congreso para cuando se aborde el proyecto en el recinto del Senado: “Vamos a estar en la calle desde el tratamiento y hasta que sea necesario”. Y añadió: “Ya ni siquiera se trata de la reforma de Ganancias, hay preocupaciones mayores que se entraman con la delegación de facultades que le están entregando al presidente y que inhibe las garantías al trabajo argentino”.
El gremialista recordó que desde el primer proyecto de Ley Ómnibus, el el que se intentó abrir el Mar Argentino a los pesqueros chinos (aunque luego se retiró este capítulo sobre la Ley de Pesca), el Gobierno repite embates contra el sector de la navegación. “Hay un proyecto para derogar la Ley de Cabotaje, para abrir la actividad naviera argentina y para importar mano de obra extranjera. Ni siquiera vamos a tener salario para que nos descuenten las ganancias”, advirtió Moreno. Y concluyó: “Sabemos que tiene 5 meses de gobierno, pero para arruinar a la Argentina solo le basta un día y está a un solo paso”.
La movilización del Centro de Patrones coincidió con la de cientos de empresarios Pyme que movilizaron para expresar su rechado a la inclusión en el proyecto de Ley Bases, que hace algunos días obtuvo media sanción en Diputados, del proyecto de Régimen de Incentivo para Grandes Inversiones (RIGI), que aseguraron que generará la quiebra de miles de pequeñas y medianasempresas y el consecuente despido de más de 100 mil trabajadores.
Muchos gremios ya garantizaron su presencia frente al Congreso para cuando se aborde el proyecto en el recinto, que se supone podrìa ser el próximo 23 o 24 de marzo (aunque luego la iniciativa deba volver a Diputados por las modificaciones que se introducirían), para plantear su oposición plena a una iniciativa que implicará un enorme retroceso para el mundo del trabajo. “Los diputados que le dieron la media sanción tendrán que dar explicaciones sobre su decisión de acompañar este proyecto, porque lo que está saliendo a la luz en el debate en el senado los ubica en el podio de los principales promotores del desmantelamiento de la Nación”, concluyó Moreno.