Dos de las organizaciones sindicales de mayor caudal de afiliados en el país; la Unión Obrera Metalúrgica (UOM), de rol central en el desarrollo de la industria Argentina, y la Federación de Luz y Fuerza del área de servicios eléctricos esenciales; están protagonizando una conflictiva negociación paritaria.
En el caso de la Federación Argentina de Trabajadores de Luz y Fuerza, que encabeza Guillermo Moser, se ratificó el paro del gremio en todo el país para el próximo lunes 5 de febrero –aunque se sospecha el dictamen de una conciliación-, junto al área de Transporte de Energía Eléctrica “tras el fracaso de la negociación paritaria con las empresas del sector”.
La acción gremial se hará efectiva por personal técnico, manual, operativo y administrativo, aunque se mantendrán las guardias mínimas establecidas por la ley que rige para los servicios esenciales.
Por su parte, en lo que respecta a la UOM, el gobierno dictó –como era de esperar- la correspondiente conciliación obligatoria por 15 días, lo que puso un impasse en el plan de lucha anunciado por el gremio que lidera Abel Furlán.
La UOM viene teniendo negociaciones muy complejas con las distintas patronales, pero principalmente con la rama siderúrgica. Las cámaras de la actividad que siempre han tenido diálogo directo con los distintos gobiernos por tratarse de actividades centrales para la obra pública y la suma de valor agregado a su producción, sienten que el vínculo es aún más fluido con la actual administración nacional.
Así, luego de más de media docena de reuniones sin alcanzar ningún tipo de acuerdo, ni siquiera acercar las propuestas de las partes, sindicato y cámaras volverán a verse las caras en una próxima audiencia establecida para la semana próxima.
