Después que en las últimas semanas una medida de fuerza gremial del Sindicato Unidos Portuarios Argentinos (SUPA) paralizara las actividades de carga y descarga en el puerto de Rosario por conflicto con una empresa del grupo Vicentin, la Unión Industrial Argentina (UIA) presentó un reclamo planteando que en los containers retenidos se encuentran insumos de importancia vital para el funcionamiento industrial, así como una cantidad de productos precederos.
El conflicto con la empresa Terminal Puerto Rosario (TPR), integrada por Vicentin y la chilena Ultramar SA y concesionaria de los muelles 1 y 2 del puerto rosarino, es de larga data, registrándose tensiones por lo menos desde el mes de abril por reclamos salariales. La tensión subió a fines de año, cuando la empresa respondió despidiendo a cinco trabajadores y suspendiendo a otros 50, dejando de pagar los sueldos y presionando para extender la jornada laboral de 6 a 8 horas.
El SUPA respondió con distintas medidas de fuerza que lograron hacer retroceder todos los intentos de TPR, excepto en lo que hace a la reincorporación de los cinco despedidos, y logrando una importante recomposición salarial. En ese conflicto, el gremio incluso rechazó la conciliación obligatoria dictada por la ministra de Trabajo Raquel “Kelly” Olmos.
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Pero el extenso conflicto gremial en respuesta a las presiones empresarias derivó en la paralización del movimiento de containers del puerto, una situación que genera impacto en otras áreas económicas. “A raíz del conflicto que mantiene paralizado al puerto de Rosario y que afecta el desarrollo de la actividad productiva desde hace un mes, la Unión Industrial Argentina (UIA) realizó gestiones ante las autoridades correspondientes. De acuerdo al monitoreo realizado por la entidad, al día de la fecha se mantiene inmovilizada la carga de más de 1000 contenedores”, explicaron desde la entidad industrialista.
“Más allá del conflicto laboral entre el gremio y la empresa, la UIA manifiesta la necesidad de liberar cuanto antes la carga inmovilizada, razón por la cual ha solicitado al Ministerio de Trabajo se proceda a declarar la esencialidad de dicha actividad para no continuar afectando las cadenas de valor y restablecer el abastecimiento de bienes a lo largo del país”, añadieron desde la UIA.
En el mismo sentido, recordaron que el reclamo gremial también está generando un impacto negativo en el comercio internacional, remarcando que hay empresas (cerealeras, alimenticias, automotrices y exportadoras de electrodomésticos) que no están pudiendo cumplir con sus compromisos de ventas y plazos acordados con clientes del exterior.
