La Unión Tranviarios Automotor (UTA), el gremio de los choferes de colectivos encabezado por Roberto Fernández había anunciado este jueves por la noche un paro de los servicios de corta distancia a nivel nacional para el próximo lunes 26, apostando como en ocasiones anteriores al inmediato dictado de una conciliación obligatoria por parte del Ministerio de Trabajo, que se concretó en la mañana de este viernes.
Un comunicado de prensa firmado por el titular del gremio Roberto Fernández destaca que “los trabajadores del Área Metropolitana de Buenos Aires, como los del interior del país, no han sido incluidos en un plan de vacunación contra el Covid-19”. Y añade, incorporando a los reclamos la cuestión salarial: “Es porque tras largos meses de audiencias sin resultados no nos han dado respuestas a los pedidos salariales”.
“Exigimos que tanto las autoridades del Ministerio de Transporte como los empresarios sepan que el conflicto salarial no se resuelve sin sensibilidad social y justicia social que las actuales circunstancias demandan”, amplía el texto del gremio.
Después de que Trabajo dictara una nueva conciliación obligatoria por el plazo de diez días, la oposición a Fernández en el gremio lo acusó de “amagar” nuevamente con una medida de fuerza que ya se sabía que no iba a prosperar para extender los plazos de la negociación con las cámaras del sector.