Este miércoles el presidente Alberto Fernández declaró por escrito en la causa sobre la cerealera Vicentin que tramita en la Justicia de Rosario. La declaración del primer mandatario se vincula con la reunión que mantuvo con uno de los principales directivos de la empresa, Sergio Nardelli. Fernández sostuvo que que durante el encuentro, el empresario reconoció que el gran número de empresas vinculadas al grupo Vicentin se debía al objetivo de tomar deuda.
La declaración fue presentada ante el fiscal de la Unidad Fiscal de Delitos Complejos de Santa Fe, Miguel Moreno, quien ahora analizará los dichos del Presidente. Vicentin atraviesa un concurso de acreedores desde finales de 2019, cuando suspendió todos sus pagos afirmando que la empresa atravesaba un proceso de “estrés financiero”. Luego se confirmaron deudas con cerca de 1700 acreedores, incluyendo al Banco Nación, que le entregó millonarios préstamos a la empresa durante el macrismo.
Gustavo Feldman, abogado de los productores damnificados, había requerido el testimonio de Fernández por una entrevista periodística en la que Horacio Verbitsky da cuenta de su encuentro con Nardelli en diciembre de 2019, donde supuestamente el empresario ya fallecido había manifestado que muchas empresas del entramado societario de Vicentin eran “sellos” creados para tomar deuda.
Fernández respondió al cuestionario de Feldman negando que hubiera existido ese encuentro y aclarando que la única entrevista que tuvo con el empresario fue meses más adelante, el 12 de junio pasado, en el marco del fallido intento oficial de estatizar la empresa. El encuentro fue en la Quinta de Olivos y contó con la presencia del gobernador santafecino Omar Perotti, el ministro de Desarrollo Productivo Matías Kulfas, el de Agricultura Luis Basterra y otros funcionarios.
En su escrito, Fernández sostuvo que Nardelli reconoció que “varias de esas empresas eran estructuras que habían sido creadas para obtener créditos bancarios”, lo que, según Feldman, ratifica la denuncia de los acreedores. Además, el abogado consideró que “el testimonio del presidente de la Nación sobre una investigación penal no deja de ser un hecho, además de inusual, altamente relevante”.
Por otro lado, Vicentin convocó a sus accionistas a una nueva asamblea para el próximo 29 de abril, con una agenda que entre sus temas principales destaca la necesidad de definir si la empresa se capitaliza con aportes propios de los accionistas o permite el ingreso de acreedores, como estrategia para incrementar el capital social y evitar la disolución. Esta última posibilidad había sido planteada por un grupo de acreedores y cuenta con el aval del Banco Nación como alternativa a la liquidación definitiva).