No se hizo referencia explícita en el comunicado oficial que la Central obrera difundió en “repudio” a las medidas económicas anunciadas por el gobierno de Mauricio Macri y al “golpe” que significa al sindicalismo “la degradación de los Ministerios de Trabajo y Salud a secretarías”, pero lo cierto es que, a partir de las declaraciones de algunos “pesos pesados” de la CGT, habría comenzado a barajarse esa posibilidad.
Las medidas anunciadas por el presidente Mauricio Macri y por el ministro Nicolás Dujovne acrecentaron el malestar de la dirigencia sindical y pusieron presión, interna y externa, para que la CGT adelante el paro que la semana pasada anunció para el martes 25 de este mes.
Los anuncios del Gobierno “lejos de generar confianza en los trabajadores, multiplicó la incertidumbre sobre el futuro inmediato” y eso “genera condiciones para que se adelanten las protestas”, expresó Juan Carlos Schmid, triunviro de la CGT.
“No toleraremos más despidos en la administración pública ni en el sector privado. Basta de ajuste sobre los trabajadores y los que menos tienen” señalaron oficialmente en el comunicado, cuando los despidos están a la orden del día en ambos sectores. Ese parece ser el límite.
En la misma jornada, tanto el secretario general de la CTA Autónoma, Pablo Micheli, como el de la CTA de los Trabajadores, Hugo Yasky, también pidieron a la CGT que adelante la fecha del paro del 25 de este mes.
De hecho esa iniciativa no fue descartada por los miembros del triunvirato, y también fue manifestada por Hugo Moyano, de Camioneros, gremio que hace poco se retiró de la CGT.