Los programas oficiales en marcha denominados Precios Máximos y Precios Cuidados no han ocultado las tensiones que existen entre supermercados y empresas por aumentos de precios. De hecho, las cadenas han denunciado que en las últimas semanas las alimenticias y firmas de limpieza presionan para aumentar productos en un promedio del 10%.
Desde la cadena CADAM no ocultaron su malestar y «blanquearon» que «las empresas no están convencidas y están pasando listas porque las presiones para subir 10% los precios lamentablemente continúan, y pareciera que el esfuerzo del Gobierno, para nuestros proveedores, quedó corto en los porcentajes».
«Hay muchas empresas que no quedaron conformes y se la ‘toman’ con los mayoristas o los otros segmentos. Ya nos han hecho saber que seguirán buscando incrementos de hasta 15%», añadieron.
Los comercios han señalado que faltan productos y que se observa que Mastellone intenta aplicar subas indiscriminadas, algo que ya tomó estado público y puso en acción a la Secretaría de Comercio Interior que lidera Paula Español.
La Secretaría de Comercio intimó a Mastellone por los aumentos encubiertos de La Serenísima
El Gobierno entiende que el aumento encubierto, en algunos casos justificado como “costos de flete”, viola el acuerdo sobre Precios Máximos en vigencia. Inspecciones llevadas adelante por la Subsecretaría de Acciones para la Defensa de los Consumidores, dependiente de la Secretaría de Comercio encabezada por Paula Español, confirmaron que Mastellone había mantenido los importes de los productos vendidos a sus clientes, adicionando un injustificado 3% a la facturación global.
En esta línea, la Federación Argentina de Supermercados (FASA) y la Cámara Argentina de Supermercados (CAS), intentaron replicar el pedido oficial, que es no comprar productos con aumentos de precios mayores y que cada cadena y/o establecimiento denuncien a las empresas que remarcan o entregan menos mercadería.